Capítulo

 1 1 |        como pude, grité: «¡Viva el Emperador!». ~ ~Decía estas palabras
 2 1 |     cuerpos de ejército y venga el Emperador en persona a dirigir la
 3 1 |         rusos, con lo de que si el Emperador fue por aquí o vino por
 4 1 | resbalarían y... pobres nalgas del Emperador... digo, de los tres emperadores,
 5 1 |         los jefes más queridos del Emperador. ¿Saben Vds. quién es Lefebvre?
 6 3 |          ha cedido sus derechos al Emperador, lo mismo que Carlos IV. ¿
 7 6 |            Inglaterra... Cuando el Emperador nos trasladó de improviso
 8 6 |   precisamente es lo que quiere el Emperador y todo lo dispone de modo
 9 6 |           que hay a la derecha. El Emperador, después de llenarse las
10 6 |       perderse en los pantanos. El Emperador manda que la derecha pase
11 6 |           entrar en fuego; pero el Emperador contenía el ardor de aquellos
12 6 |         sobre ellos. En el acto el Emperador manda que la artillería
13 6 |   levantaban para gritar «¡viva el Emperador!», y cuando a la noche siguiente
14 6 |           enfrente para recibir al emperador de Austria, parecía un dios
15 6 |    mandados por el tío Parranclof, emperador del Zurrón y rey de los
16 9 |           desconcertolos Napoleón, emperador de los franceses, al poner
17 11|           insurrección y de que el Emperador está oculto, añadiendo algunos
18 11|          Francia la conducta de su Emperador con la España. ~ ~Los sueltos
19 18|           el parecer del Rey y del Emperador. Hace tres meses había en
20 18|          da la gana de obedecer al Emperador, porque los españoles mandamos
21 21|       tierra maldita, a la cual el Emperador ha tenido la mala ocurrencia
22 23|         que no me cambiaría por el emperador Napoleón - repuso el conde - .
23 24|          hombres; que los vivas al Emperador y los gritos de cólera eran
24 31|         engañando a la Nación y al Emperador. ~ ~Doña María se llevó