Capítulo

 1 2 |  participar a Inés que estabas vivo. «¡Cuánto se va a alegrar
 2 8 |      de aquel hermoso país, el vivo sol, el viaje, el ejercicio
 3 13|     así: ~ ~ - Inés mía, estoy vivo, he resucitado. Salí vivo
 4 13|      vivo, he resucitado. Salí vivo de aquel montón de victimas,
 5 13|   amigo D. Celestino. Al verme vivo y sin ti, pensé que Dios
 6 15| suplicándonos que no dejáramos vivo un francés, y pidiendo los
 7 16|        continuaba cada vez más vivo el tiroteo de fusil. ~ ~
 8 19|   incendien el pueblo y lleven vivo o muerto al alcalde. Arde
 9 19| Montoro, y La Torre, conducido vivo, va a ser pasado por las
10 20|        eres valiente y vuelves vivo, a palmetazos te enseñaré
11 23|       otra vez el tiroteo, más vivo aún y más cercano; y en
12 26|   Cuando esto pasaba, sentí un vivo clamor de la naturaleza
13 27|        a quemar de un modo muy vivo, me decidí a leer la carta
14 27|       al mundo como testimonio vivo de la funesta alucinación
15 28|       parece que debe de estar vivo. ~ ~ - ¡Qué miedo, qué pavor! ¡
16 29|   mayor sorpresa - . ¿Está Vd. vivo? Yo le hacía en el otro
17 29|    barrio. ~ ~ - No, muchacho, vivo estoy - me respondió - .
18 30|       D. Diego - . ¿Pero estás vivo, Gabriel, y tú también,