Parte,  Capítulo

1    I, 3 |      Él quien me ha dado este genio vivo, esta impaciencia porque
2    I, 5 |      de Quevedo, porque aquel genio colosal de las burlas descansaba
3    I, 7 | hijita, y no seas tan viva de genio...». «¿Qué tal? ¿está ya
4    I, 18|      muy rumboso, vivísimo de genio, generoso y de trato galán
5    I, 26|       que todo lo alumbra, su genio suave y dulce que jamás
6    2, 8 |    golpeaba el suelo, como un genio de las Mil y una noches.
7    2, 12|   Newton, es decir, poseer el genio y la inspiración sublime