Parte,  Capítulo

  1    I, 3 |             los inmensos tesoros de su corazón, lleno de Dios, y no nos
  2    I, 5 |           deseos y afanes en el limpio corazón de las muchachas, extravían
  3    I, 7 |           entregado parte mínima de su corazón a hombre nacido. Y don Juan
  4    I, 7 |         mediano interés, no por eso su corazón dormía. Había perdido a
  5    I, 7 |         siempre lugar muy grande en el corazón de su hermana, y esta no
  6    I, 7 |                vestidura.~ ~ Además el corazón de Gloria estaba lleno de
  7    I, 9 |              puesto que es bueno en su corazón, y estos desvaríos no perderán
  8    I, 10|             natural impulso de su sano corazón se inclinaba a suponer lo
  9    I, 10|                cuanto la rodea, así su corazón proyectaba las claridades
 10    I, 10|               los de Ficóbriga; que su corazón estaba limpio de ambiciones;
 11    I, 11|        preceder una elección libre del corazón, previo el consejo de las
 12    I, 11|             revelará los tesoros de su corazón bueno y recto. No confundas
 13    I, 11|                 Tienes entendimiento y corazón y piedad y fe cristiana
 14    I, 12|              nadie que interesase a su corazón.~ ~ Luego subió a su cuarto
 15    I, 12|             voz sólo por ella oída. Su corazón latía con fuerza y vivo
 16    I, 12|         encontrado ya el elegido de su corazón; pero una serie de indagaciones
 17    I, 14|         indecibles congojas. Sentía su corazón ensancharse y contraerse.
 18    I, 14|      tranquilizarse por completo, y su corazón se contraía recogiéndose
 19    I, 15|         sentarse.~ ~ - ¡Ay, niña de mi corazón! Esto es una Babel. No hay
 20    I, 15|            señor cura, no todos tienen corazón de hierro como usted.~ ~ - ¿
 21    I, 15|               tono que la herida de su corazón había sido tocada - . ¿Cómo
 22    I, 19|             los presentes sintieron su corazón palpitar con fuerza.~ ~ - ¿
 23    I, 19|              poniendo la mano sobre su corazón - . Gracias.~ ~ - Aunque
 24    I, 20|           figúrate que Dios le toca el corazón, figúrate que un rayo de
 25    I, 20|             lástima!...~ ~ - Y un gran corazón.~ ~ - También.~ ~ - Tenemos
 26    I, 20|               tío se le clavaban en el corazón como espinas.~ ~ - Pero
 27    I, 20|          lástima que teniendo tan buen corazón...~ ~ - Sí que es una lástima...
 28    I, 20|         ilumine. Ven y reposa sobre mi corazón, hijo mío, ven a aumentar
 29    I, 20|          argumentos. Donde hay un buen corazón, está la mitad del camino
 30    I, 22|                 Rehúso... pero de todo corazón.~ ~ - ¿Lo has pensado bien?~ ~ -
 31    I, 23|           mujer alguna capaz de dar su corazón y su mano a un hombre que
 32    I, 25|                palabra, señorita de mi corazón! - exclamó José con acento
 33    I, 26|               en par las puertas de su corazón para que a borbotones saliese
 34    I, 26|                y preveo desgracias. El corazón me anuncia que no llegaremos
 35    I, 26|         permite que los conflictos del corazón sean resueltos por las maldades
 36    I, 26|               negra se asentó sobre mi corazón, oprimiéndolo. Cuando le
 37    I, 26|                lo que ya presagiaba mi corazón... Hace seis que me exigió
 38    I, 26|              madre, si no te adoro. Mi corazón te adivinaba hace tiempo.
 39    I, 26|               que te hallaba». ¡Ay! Mi corazón le aguardaba también como
 40    I, 26|                persona es perfecta, su corazón lleno de bondades que nunca
 41    I, 28|                este mundo, amiga de mi corazón, no es para nosotros.~ ~
 42    I, 28|            todo, Dios mío, menos en el corazón!~ ~ Concluyendo su ardiente
 43    I, 28|              devorada por la llama. Su corazón se deshacía.~ ~ - Gloria -
 44    I, 29|            aquel día sintió frío en el corazón y un extraño ímpetu de rebeldía.
 45    I, 30|             dime ahora, loquilla de mi corazón, ¿cómo pudiste dar calor
 46    I, 30|                de todos los limpios de corazón.~ ~ D. Ángel frunció el
 47    I, 30|                con la boca y no con el corazón, porque esas ideas que he
 48    I, 30|           Santo?~ ~ - No sé, tío de mi corazón, lo que he perdido. Sólo
 49    I, 33|               a mi labio, energía a mi corazón, vigor a mi espíritu. Estote
 50    I, 33|            figura. Al verla llénase mi corazón de intensísima congoja y
 51    I, 35|              si quieres quedarte en mi corazón.~ ~ - ¡No quiero, no quiero!~ ~
 52    I, 37|             venas, has hecho saltar mi corazón como si hubieras dado sobre
 53    I, 37|        contribuido al cautiverio de su corazón, le rechazó severamente,
 54    I, 38|               un dolor agudísimo en el corazón, y no pudo decir palabra.
 55    2, 2 |              vía de los negocios... El corazón de esa gente se ha de ablandar
 56    2, 2 |             incapaz de cólera; pero su corazón se llenó de pena. Emprendiendo
 57    2, 6 |              rutinario entendimiento y corazón vacío. Es evidente que las
 58    2, 7 |            amargo, y ofrezco a Dios mi corazón llagado que chorrea sangre
 59    2, 7 |         familia!... Gloria, hija de mi corazón, entra, entra en un convento,
 60    2, 10|                 José?~ ~ - Con todo mi corazón - repuso vivamente el sepulturero - .
 61    2, 10|              que aquel hombre hería su corazón; pero al tocar tan delicado
 62    2, 10|                José: tú eres hombre de corazón... Me han asegurado que
 63    2, 11|               fibra más delicada de mi corazón, de un corazón que tiene
 64    2, 11|          delicada de mi corazón, de un corazón que tiene el acendrado fuego
 65    2, 11|                las cosas de Dios y del corazón y del corazón, le dice usted: «
 66    2, 11|               Dios y del corazón y del corazón, le dice usted: «Abandona
 67    2, 11|      Buenaventura, sintiendo que en su corazón había sido tocada una fibra
 68    2, 11|                fuerte, un argumento de corazón, de ternura, y ese lo dejo
 69    2, 12|               se negaron a obedecer al corazón. Escribió a su hermana y
 70    2, 12|              que directamente hería su corazón, D. Buenaventura vaciló
 71    2, 12|              sobrina Gloria, que en su corazón no la distinguía de sus
 72    2, 13|                 lo que Él quiere es tu corazón. ¡Los corazones son las
 73    2, 13|             perdonas?~ ~ - Con todo mi corazón - repuso Gloria, volviendo
 74    2, 13|              se ponía la mano sobre el corazón para sentir sus latidos,
 75    2, 14|           Daniel se dispusiera de todo corazón a recibir consejos de la
 76    2, 15|            Quita, pues, el enojo de tu corazón y aparta el mal de tu carne,
 77    2, 15|         encuentro una mujer, astuta de corazón... Rencillosa y alborotadora,
 78    2, 15|              seguro de que volverá. El corazón me lo dice.~ ~ - ¿Y estaremos
 79    2, 15|             misteriosa, trazada por un corazón que corría en busca de su
 80    2, 15|            hacia las colinas - . Si el corazón me engaña esta vez dudaré
 81    2, 16|               y verdadero de su propio corazón. Como el agua que afluye
 82    2, 16|           tienen un eco sensible en mi corazón, y aquí se repiten, doliendo,
 83    2, 16|                ha sabido adivinarlo mi corazón, Gloria, mi corazón que
 84    2, 16|      adivinarlo mi corazón, Gloria, mi corazón que no puede estar mucho
 85    2, 17|                      Señora, tía de mi corazón, he faltado, he pecado contra
 86    2, 17|                que esto se me sale del corazón y no puedo ocultarlo, porque
 87    2, 18|               la autoridad. Hija de mi corazón, mientras no te sometas
 88    2, 18|             más legítimo que en humano corazón puede existir, después del
 89    2, 18|                   Ay! pobre hija de mi corazón, siento que mis palabras
 90    2, 18|                absolutamente limpio tu corazón de liviandad, de vanidades
 91    2, 19|                 que te sujetes de todo corazón a Dios para poder obtener
 92    2, 19|               sí mismo; que apartes tu corazón del amor de las cosas visibles
 93    2, 19|           puedo hacerlo. Arranco de mi corazón todos los sentimientos menos
 94    2, 19|               deleite que existe en tu corazón, el cariño maternal... ¿
 95    2, 19|                Es forzoso arrancar del corazón la fibra más sensible, arrojar
 96    2, 19|           joven - , mete la mano en tu corazón y tócalo y observa si el
 97    2, 19|             efecto metía la mano en el corazón y tanteaba llamas.~ ~ - ¿
 98    2, 19|          sálvamela»...~ ~ »¡Hija de mi corazón! Corrí a tu lado, te asistí
 99    2, 19|               de regenerarla». Allí tu corazón se limpiará de esa escoria
100    2, 19|             una congoja penosísima; su corazón oprimido latía con fuerza
101    2, 20|              Nazareno, han negado a su corazón el más dulce consuelo, le
102    2, 20|               al pensarlo no hay en mi corazón una sola fibra que clamando
103    2, 20|                Pues se dirá. Tengo por corazón una piedra; no soy hombre
104    2, 20|            desgracia de la amada de mi corazón, he de recordar que yo soy
105    2, 20|           feliz, yo turbé la paz de su corazón, arrastrándola a la ignominia;
106    2, 20|        atención su persona, y llené su corazón de culebras. Era como una
107    2, 20|               fiel a un compromiso del corazón necesite yo ser apóstata.
108    2, 20|           pertenece la que reina en mi corazón!.~ ~ Oprimiose la frente
109    2, 21|                Pero no te dice nada tu corazón, no se enternece contemplando
110    2, 21| acontecimientos, ¿no lo ha de decir tu corazón? Yo veo tan claro esto,
111    2, 21|              convicción profunda... Mi corazón se abre como un abismo lleno
112    2, 21|                por el clavo, pongas tu corazón dolorido, tu vida toda,
113    2, 21|               Gloria - , resuena en mi corazón como un eco del cielo.~ ~ -
114    2, 21|               que todas las fibras del corazón de su sobrina, la fibra
115    2, 22|            Cristo mientras lo niega el corazón; pero este caballero no
116    2, 22|               quieres, pero salida del corazón, pruébame que en tu alma
117    2, 22|           palabras, como salidas de un corazón lleno de verdad, no podían
118    2, 25|             desgracias, y limpiemos el corazón de todo recelo o encono.
119    2, 25|             parecer debían hallarse el corazón y el cerebro de Gloria.
120    2, 26|            Esther la aborrecía de todo corazón, exceptuando tan sólo la
121    2, 27|                    Cruel, engañas a tu corazón con palabras estudiadas -
122    2, 27|           primero que ha brotado de mi corazón de madre, de este corazón
123    2, 27|              corazón de madre, de este corazón que se ha abrasado en amor
124    2, 27|         quererme.~ ~ - ¡Ay, hijo de mi corazón! - exclamó Esther en un
125    2, 28|              ti como la apostasía. ¡Tu corazón se ha corrompido! Tú no
126    2, 28|            alborozo tan vivo inundó mi corazón! Mi pensamiento gustó las
127    2, 28|           penetra como tempestad en mi corazón.~ ~ Esther le miró atentamente
128    2, 28|           mismo? Él ha encendido en mi corazón los sentimientos más delicados
129    2, 28|              para la fantasía, para el corazón y para los sentidos. Aun
130    2, 28|                océano que arrancar del corazón de una mujer cristiana la
131    2, 28|              que hacían... conocían el corazón humano y el gran flaco de
132    2, 28|              pierdo mañana, hijo de mi corazón, conságrame esta noche;
133    2, 28|              de todo eso tan caro a mi corazón. Hablemos toda la noche
134    2, 29|              exagerada movilidad de su corazón y de su sangre anhelantes
135    2, 29|               he salvado... hijo de mi corazón! Al fin eres mío otra vez.
136    2, 29|         También Jehová ha hablado a mi corazón y me ha dicho: «sálvale»... ¿
137    2, 30|             ahora te diría con todo mi corazón: «Levántate: todos tus pecados
138    2, 30|              muertos. Pobre hija de mi corazón! - dijo el pelado, contemplándola
139    2, 30|         gallardas figuras. Según él el corazón de Gloria era un caballo
140    2, 30|                dulces del lenguaje del corazón... La pobre enferma seguía
141    2, 30|                más a las prendas de mi corazón».~ ~ La pobre se sintió
142    2, 30|            fuerza en las prendas de su corazón. Pensó tanto, que las lágrimas
143    2, 30|              él era feo, y al verle su corazón se partió en dos. Observó
144    2, 31|               estoy!... Se me rompe el corazón... No sé cómo me canso,
145    2, 31|               veré a las prendas de mi corazón, que huyen corriendo como
146    2, 31|               he venido aquí?... Es mi corazón el que ha salido y ha echado
147    2, 31|        horrible, un presentimiento. Mi corazón ha gritado: ¡ladrones!...
148    2, 32|              claramente he leído en tu corazón! Tú me has dicho que nada
149    2, 32|        sacrificio y lo agradezco en mi corazón de mujer; pero no puedo
150    2, 32|               movimiento el incansable corazón. Levántame en tus brazos
151    2, 32|            serás mía. Dame la mano. El corazón te doy! - exclamo Gloria
152    2, 32|          tiempo que estoy muriendo. Mi corazón que es el que tiene la herida
153    2, 32|               mi ser se acaba. Toca mi corazón, verás cómo apenas late.
154    2, 32|             presento las prendas de mi corazón y los nobles afectos de
155    2, 32|                 Con los labios, con el corazón que se le partía de dolor,