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Parte, Capítulo
1 I, 1 | que montes. La graciosa joven desaparece, y al poco rato 2 I, 2 | constantemente. ¡Encantadora joven! A todo atendía, cual si 3 I, 3 | bendita calma - exclamó la joven sentándose - . Yo me abraso 4 I, 8 | órdenes, cuando encaró con un joven. Ambos sonrieron; ella, 5 I, 8 | laico.~ ~ El laico era un joven como de treinta años muy 6 I, 8 | estrechando la mano de la joven - . Ya sé que todos están 7 I, 8 | estaría toda la vida - dijo el joven con evidentes señales de 8 I, 9 | discurso, presentación~ El joven entró en la casa. Estaban 9 I, 9 | gran benevolencia en el joven seglar que había traído 10 I, 9 | Aquí está nuestro heroico joven, nuestro valiente soldado. 11 I, 9 | perniciosas lecturas, este joven aspira al honroso nombre 12 I, 9 | Juan Amarillo haciendo al joven Horro un saludo pomposo - , 13 I, 9 | cierta ocasión, como el joven orador y publicista necesitase 14 I, 10| tenía a Rafael del Horro, joven espada de la Iglesia, una 15 I, 10| tren le habló el ardiente joven del negocio de la elección, 16 I, 11| y contento de todos. Una joven que no ha entretenido su 17 I, 11| una honesta familia. Esa joven eres tú. Tu carácter bondadoso, 18 I, 11| para ser tu esposo. Hay un joven cuyo carácter, talentos 19 I, 11| niñas de estos tiempos. Ese joven ¿necesito nombrarlo? es 20 I, 11| ha tratado bien... ¡Pobre joven! Cuando me reveló, respetuosamente 21 I, 12| todas las cualidades de un joven maduro, de un carácter honrado 22 I, 12| inclinación vehemente hacia aquel joven; pero aquí empezaba la dificultad, 23 I, 12| excelente sujeto, apreciable joven, como él dice. Sin duda 24 I, 12| Rafael.~ ~ - ¡Qué excelente joven es ese D. Rafael! - dijo 25 I, 13| contestar a varias preguntas del joven del Horro y a oír estudiadas 26 I, 13| D. Ángel, apoyado en el joven orador y periodista, imagen 27 I, 16| tienes a un desgraciado joven a quien acabamos de salvar 28 I, 18| retrato.~ ~ Era D. Silvestre joven, sanguíneo, fuerte, grandísimo 29 I, 19| acento patético y solemne el joven dijo:~ ~ - ¡Señor, Señor 30 I, 20| que como hoy se marcha ese joven... Pero hazme el favor de 31 I, 20| desasosegado desde que ese joven está en nuestra casa, y 32 I, 20| decidido a dirigirme a ese joven, a encararme atrevidamente 33 I, 20| cuanto más trato a este joven y oigo sus palabras y mido 34 I, 21| abogacía?~ ~ - Mal - repuso el joven con hastío - ; después de 35 I, 21| yo, qué sé yo - indicó el joven campeón de Cristo mirando 36 I, 22| bien las prendas de ese joven?~ ~ - Sí, y he visto que 37 I, 23| miraron con simpatía al joven extranjero, si bien le inundaron 38 I, 25| mil veces! - exclamó la joven con piadoso entusiasmo.~ ~ - 39 I, 26| en torno al cerebro de la joven despierta un ritmo extraño 40 I, 27| pudiera nacer el amor en una joven verdaderamente piadosa.~ ~ - 41 I, 29| contrario a la honestidad de la joven, porque esto, dicho sea 42 I, 32| recibió a este. El distinguido joven se empeñó con cierta fatuidad 43 I, 32| neblina en el rostro de la joven. D. Juan la miró también. 44 I, 33| para dirigiros la palabra. Joven, sin experiencia, sin conocimientos, 45 I, 33| el discurso del valeroso joven, recibió apretados abrazos 46 I, 35| lo suplico.~ ~ La pobre joven casi se ahogaba hablando.~ ~ - ¡ 47 I, 35| pequeño eres! - exclamó la joven apelando desesperada a la 48 I, 37| Daniel, Daniel! - clamó la joven llena de congoja - . ¿Qué 49 I, 37| Mentira, mentira - exclamó la joven de rodillas en el suelo 50 I, 38| Silvestre en voz baja al joven del Horro - . Cuando a este 51 2, 1 | y D. Buenaventura el más joven. Este era feliz esposo y 52 2, 3 | voz de que la desgraciada joven, antaño llamada joya de 53 2, 4 | arreglar las flores, era la más joven de las tres, y si se quiere 54 2, 6 | resonaron en el alma de la joven con atronador llamamiento, 55 2, 7 | el valeroso ánimo de la joven. Cuando se puso en marcha 56 2, 11| Supongamos que amo a una joven israelita, que... Vamos, 57 2, 11| religión?~ ~ - Según fuera la joven. Como Gloria, lo mismo que 58 2, 14| ni salida ni entrada del joven quedaba sin ser sometida 59 2, 16| abrazando tiernamente a la joven, a despecho de ella - . 60 2, 16| y estrechando más a la joven en sus brazos de hierro - . 61 2, 16| ligeramente sus brazos, y la joven respiró con más libertad.~ ~ - 62 2, 16| sus labios al oído de la joven, pronunció unas palabras 63 2, 16| repitió él con frenesí.~ ~ La joven exhaló un tenue suspiro, 64 2, 16| notar que el pulso de la joven se extinguía; advirtió extremada 65 2, 16| soledades del campo.~ ~ La joven no respondía; pero entreabrió 66 2, 17| Buenaventura levantó a la joven del suelo, hízola sentar, 67 2, 18| Dios, yo lo haré - dijo la joven levantándose. ./. Después 68 2, 18| amor de Dios! - exclamó la joven rechazando con rubor aquel 69 2, 18| su mano del pecho de la joven, como una divinidad que 70 2, 19| con cariño a la atribulada joven - , mete la mano en tu corazón 71 2, 19| tranquilizarla. Al fin iba cayendo la joven en un estado semejante al 72 2, 21| viva. Serafinita rogó a la joven que diese un paseo por la 73 2, 25| de esposo 10 a esa pobre joven, víctima de un arrebato 74 2, 27| palabras estudiadas - dijo el joven con brío - . No podrás, 75 2, 27| incomparable cabeza del joven - . Hemos cometido una falta 76 2, 28| Luego engañas a esa pobre joven, engañas a una honrada familia? - 77 2, 28| qué hablas? - repuso el joven con cierto enojo.~ ~ - Tu 78 2, 28| cristiano para salvar a esa joven de la tiranía de sus parientes, 79 2, 28| Aun considerando en esa joven el amor más ardiente hacia 80 2, 29| salir de la capilla, la joven tenía los ojos encendidos; 81 2, 29| mano sobre los cabellos del joven, y con voz trémula y cariñosa 82 2, 29| resolución de esa buena joven, que sin duda ha conocido 83 2, 30| recelo el semblante de la joven.~ ~ - Llamo yo morir a esto.~ ~ - 84 2, 30| era una farsa - repuso la joven.~ ~ - Pues si le crees bueno 85 2, 30| delante de mí - repuso la joven con cierto desvarío - , 86 2, 30| Por qué ríes así?~ ~ La joven reclinó su cabeza en el 87 2, 30| contemplaron en silencio a la joven, que cerrando los ojos parecía 88 2, 31| Daniel Morton. La desgraciada joven sintió un temblor tan vivo 89 2, 32| sentaron junto a la cuna. La joven apoyaba fatigadamente su 90 2, 32| No hables así - dijo la joven con pena - . ¿Pues qué, 91 2, 32| a Jesucristo - repuso la joven con alegría - . Yo estaré 92 2, 32| los últimos alientos de la joven oyó estas palabras.~ ~ -