Parte,  Capítulo

 1    I, 5     |       años de casado. Su digna esposa le dejó a Gloria de doce
 2    I, 12    |   contrario. Teresita la Monja esposa de D. Juan Amarillo, en
 3    I, 37    |              Querido amor mío, esposa - dijo Morton abrazándola
 4    I, 37    |   glorío en ti, y si fueras mi esposa, ninguna mujer existiría
 5    I, 37    |      ni más amada.~ ~ - ¡Yo tu esposa, tu esposa yo!... ¿qué dices? -
 6    I, 37    |               Yo tu esposa, tu esposa yo!... ¿qué dices? - gimió
 7    I, 38    |        el dote que le llevó su esposa Teresita la Monja, y con
 8    I, 38    |       Con decir a usted que mi esposa lo advirtió primero, y que
 9    I, 38    |       ha visto, quién?~ ~ - Mi esposa y otras personas de la villa.
10    2, 1     |        pórtico de la Abadía la esposa de don Juan Amarillo - ,
11    2, 1     |       con lepra repugnante. La esposa abofeteada y arrastrada,
12    2, 4     | lenguas.~ ~ Teresita la Monja, esposa de D. Juan Amarillo era
13    2, 4     |      las armas, por haber sido esposa de uno que componía armas,
14    2, 5     |      hechura de Dios - dijo la esposa de Barrabás - . Pero hay
15    2, 14    |      del párroco, la excelente esposa de Barrabás fue recobrando
16    2, 24    |    amigas... mi cuñada Teresa, esposa del alcalde de Ficóbriga
17    2, 24    |        al señor Alcalde y a su esposa - añadió Esther.~ ~ - Teresa
18    2, 25(10)|                                esposa» en el original. (N. del
19    2, 25    |      al señor de Amarillo y su esposa. El único de la raza que
20    2, 25    |        D. Juan Amarillo y a su esposa! ¡Y ella y él la habían
21    2, 26    |     cultura y educación. Buena esposa y madre amorosa, había dado
22    2, 28    | conquistar mi bien perdido, mi esposa, por medio de una fingida
23    2, 28    |       situación especial de mi esposa la disculpa. Aun este motivo
24    2, 28    |      horrible país, la hago mi esposa, la salvo de la idolatría
25    2, 28    |   firme fe de la que llamas tu esposa. Deséngañate, ningún católico
26    2, 29    |      que a mi vida!... Gloria, esposa mía, dejarías de ser quién
27    2, 29    |    separarme de ti!... Eres mi esposa... Me perteneces... Te reclamo...
28    2, 29    |        no tienen objeto ya. Tu esposa te ha despedido. Tu esposa
29    2, 29    |     esposa te ha despedido. Tu esposa se divorcia y toma otro
30    2, 32    |        para renunciar a ser mi esposa y consagrarte al ascetismo
31    2, 32    |     eres, no puedo llamarte mi esposa! Esto es un crimen, un crimen
32    2, 32    |       mundo no podía ser yo tu esposa, porque tu conversión era
33    2, 33    |    Ficóbriga D. Juan Verde. Su esposa, atacada de una ictericia