Parte,  Capítulo

 1    I, 1 |        donde entramos. En dicho sitio hay una plazoleta, sombreada
 2    I, 2 |       tomando un objeto de este sitio para ponerlo en aquel, moviendo
 3    I, 5 |         lo volvía a poner en su sitio. Cogía otro, leía algunas
 4    I, 11|        en un apartado y umbroso sitio que abrigaban corpulentas
 5    I, 12|       marchando hacia el oscuro sitio, miró a sus espesuras, cualquiera
 6    I, 14|        de encontrarse sola y en sitio a propósito para soltar
 7    I, 15|        buscando con los ojos un sitio donde sentarse.~ ~ - ¡Ay,
 8    I, 18|         que había formado en un sitio llamado el Soto de Briján,
 9    I, 23|    visto obligado a levantar el sitio.~ ~ - El señor obispo -
10    I, 25| inmensidad azul.~ ~ Pasó por el sitio en que estaban los cinco
11    I, 28|    habló el poeta, y que en tal sitio les dice: «no me turbéis».~ ~
12    I, 38|        por bajo un emparrado en sitio muy solitario, le dijo:~ ~ -
13    2, 5 |       poner el borriquito en su sitio.~ ~ Cachorro tomó el tiento
14    2, 5 |       afirmando al animal en su sitio - . Señoras, adiós.~ ~ - ¿
15    2, 5 |         armas no se movía de su sitio, y Cachorro viendo que nadie
16    2, 6 |      capilla como se huye de un sitio infestado. Sólo quedaron
17    2, 8 |        de su presencia en aquel sitio, produciendo en el pueblo,
18    2, 8 |   callejón del Cristo Viejo. El sitio llamado de las Monjas Claras
19    2, 8 |         no acertaba a llegar al sitio de la catástrofe, porque
20    2, 8 |        esgrimir su bastón en el sitio mismo de la reyerta, no
21    2, 9 |   orador no podía estar en peor sitio.~ ~ Morton entró sin hacer
22    2, 9 |         las calles, encontró en sitio solitario a una niña que
23    2, 9 |       árboles. Sentose allí. El sitio era relativamente cómodo
24    2, 10|        aquí...? ¿en este triste sitio?~ ~ - Sí señor. Yo soy el
25    2, 25|         reclusión estrecha y en sitio que yo le designe. Exigiré
26    2, 29|         el sofá, que era en tal sitio lo que el altar en la iglesia,
27    2, 30|         pero no la tierra ni el sitio donde estaba. Todo era claridad,