Parte,  Capítulo

 1    I, 12|           no existes, sino que no puedes existir, porque serías la
 2    I, 22|          Acaso tú, una chiquilla, puedes juzgar... Pero silencio
 3    I, 24|      caridad. Dales hoy de comer. Puedes decirle que mande a los
 4    I, 26|          quiera que se hallen. Tú puedes mucho. Eres grande: no te
 5    I, 26|          empeñes en ser chica. Tú puedes volar hasta los astros;
 6    I, 27|       Derramé la palabra divina. ¿Puedes tú asegurar que no fructifique
 7    I, 37|           desesperación - . Tú no puedes tener fe en esa doctrina.~ ~ - ¡
 8    I, 37|          engañando ahora... tú no puedes ser lo que dijiste, Daniel,
 9    I, 37|       librará Jehová».~ ~ - Tú no puedes pertenecer a esa secta abominable -
10    I, 37|           no hay conciencia.~ ~ - Puedes leer en la mía como en un
11    2, 2 |      Buenaventura.~ ~ - No, tú no puedes decir eso - objetó vivamente
12    2, 2 |    vivamente Serafinita - . Tú no puedes bendecir la mano que nos
13    2, 7 |         en los abismos... ¡Ay! no puedes apartar de ti esa víbora.
14    2, 10|          cayó - repuso Daniel - . Puedes tomarlo.~ ~ Mundideo recogió
15    2, 10|        bien, amigo mío, muy bien. Puedes decir y repetir otra cosa,
16    2, 15|         que yo esté en vela?~ ~ - Puedes dormir si para ello tienes
17    2, 18|           hermano es bien clara. «Puedes concederle, me escribió
18    2, 18|          sentimientos maternales. Puedes permitirle este desahogo
19    2, 19| perfección. Tú no estás curada ni puedes estarlo, mientras no hagas
20    2, 21|        mía, que no comprendo cómo puedes dudar.~ ~ Gloria, con los
21    2, 28|          a mi conciencia. ¡Ay! no puedes tener idea de aquellas terribles
22    2, 29|          tu cristianismo.~ ~ - No puedes tener esa carta.~ ~ - He
23    2, 30|      pobre y desgraciada niña! No puedes ocultar que padeces mucho.