Parte,  Capítulo

 1    I, 1 |      costera cuando la deja de sus terribles manos destructoras el huracán.
 2    I, 25|            que acaba de sufrir tan terribles golpes.~ ~ - Si yo no soy
 3    I, 28|           Olvidándome de las leyes terribles que nos separan, me acerqué
 4    I, 28|           obstáculos subsisten más terribles e imponentes cada día. Ha
 5    I, 28|         medio de su pena, con esas terribles palpitaciones o vagidos
 6    2, 1 |     heroico silencio de ella oyera terribles anatemas de su vil conducta.
 7    2, 7 |        hombres! Las circunstancias terribles de tu caída exigen que renuncies
 8    2, 7 |            lamenta como si tuviera terribles heridas. ¡Padecer! ¿Sabes
 9    2, 7 |    desesperación. Sin rechazar las terribles afirmaciones de su tía,
10    2, 8 |            vil.~ ~ Dio órdenes tan terribles a los alguaciles, que estos
11    2, 11|          vengo después de aquellos terribles días - repuso Morton - .
12    2, 11|         pasión, las circunstancias terribles de este caso... sí... aseguro
13    2, 11|           a la boca mil argumentos terribles, abrumadores, sin réplica;
14    2, 11|       añadió el hebreo - , razones terribles, amigo mío, para que nuestra
15    2, 11|            una ley de raza: ¡y qué terribles son las leyes de raza! El
16    2, 11|           nos somete a durísimas y terribles pruebas. Los católicos tibios
17    2, 11|       nefando y he sentido las más terribles y congojosas dudas que pueden
18    2, 13|       padecerás congojas, sufrirás terribles asaltos de la mala idea,
19    2, 18| trastornaron tu alma y sumieron en terribles calamidades a tu familia.
20    2, 28|      puedes tener idea de aquellas terribles horas de duda. Yo tenía
21    2, 32|          han robado sus hijos. Las terribles injurias que dijo de ti,