Parte,  Capítulo

 1    I, 2 |          por la regular balumba de libros y papeles que en diversos
 2    I, 5 |           no pusiese reparos a los libros clásicos españoles del gran
 3    I, 6 |           echó toda la culpa a los libros, e hizo voto de no volver
 4    I, 6 |           observar que si bien los libros estimulaban en ella aquel
 5    I, 11|       sumergió en el océano de sus libros. Hasta la hora de comer
 6    I, 21|           Si yo tuviera a mano mis libros o recordara fácilmente lo
 7    I, 21|        todo lo que he leído en mis libros, le contestaría a usted
 8    I, 23|       Daniel mostraba de todos los libros santos desde el Génesis
 9    I, 23| composición literaria, bebiendo en libros y derramando su pensar en
10    I, 23|            erre que erre sobre los libros, sacándoles el redaño para
11    I, 23|            pero ¿y la irrupción de libros, y la transformación social,
12    I, 26|           olvidase, que todos esos libros de caballerías fuesen arrojados
13    I, 26|           el sabio lenguaje de los libros, y en mis adentros digo: «
14    I, 33|     seguiremos combatiendo. En los libros santos se ha dicho: «Y tú,
15    2, 1 |       vivir largas horas sobre los libros en el escritorio. Su rostro,
16    2, 5 |            alta. Lee en dos o tres libros... trabaja en costura...
17    2, 8 |           al museo de sus célebres libros montañeses. No faltaba nada
18    2, 11|       mundo que no se halle en mis libros. Al afirmar esto, no llegaré
19    2, 17|            alta voz recordando los libros santos:~ ~ - «Mejor es que
20    2, 26|          leen sus oraciones en los libros rabínicos impresos en nuestro