Parte,  Capítulo

 1    I, 1 |           descuellan camelias como árboles, recortados mirtos, tamarindos,
 2    I, 11|      corpulentas magnolias y otros árboles. Un sol tibio calentaba
 3    I, 21|            y en los troncos de los árboles grandes. Gloria entró por
 4    I, 26|           revestía de mi pena. Los árboles y las casas y el cielo,
 5    I, 29|       villa, y deteniéndola en los árboles del cementerio, pensó así:~ ~ -
 6    I, 36|        mísero barco sin timón. Los árboles del jardín flotaban cual
 7    2, 3 |            cuadros. Los arbustos y árboles de sombra, los recortados
 8    2, 8 |        manos de los acólitos, como árboles azotados por el viento.
 9    2, 9 |         entre las ramas de espesos árboles. Sentose allí. El sitio
10    2, 15|            por la luna. Los negros árboles ocultaban los senderos;
11    2, 20|  celebrarlo. El aire que mecía los árboles, las nubes que pomposamente
12    2, 29|          los frutales que parecían árboles del cielo. Sus injertos
13    2, 29|           más delicada mata de los árboles se movía: no se oía el ruido
14    2, 30|         culebras las raíces de los árboles, de los mismos árboles que
15    2, 30|         los árboles, de los mismos árboles que más arriba mecían en
16    2, 31| confusamente sobre la oscuridad de árboles y praderas.~ ~ - ¡Oh!...
17    2, 31|            y en los troncos de los árboles, pudo llegar a la anhelada
18    2, 31|      derribados) enormes y espesos árboles que daban sombra a todo