Cap., N.

 1 INT, 1 | estrechísima unión con tan excelsa Cabeza, es, en verdad, de tal índole
 2 INT, 1 |            se glorían de tener una Cabeza ceñida de corona de espinas.
 3 INT, 5 |           de Cristo se unen con su Cabeza; y, por último, para cerrar
 4   I, 7 |            dice el Apóstol - es la cabeza del cuerpo de la Iglesia13.
 5   I, 9 |          se unen entre sí y con la Cabeza de todo el Cuerpo por medio
 6   I, 11|           Señor es el Fundador, la Cabeza, el Sustentador y el Salvador
 7   I, 12|        desde el seno de la Virgen, Cabeza de toda la familia humana,
 8   I, 12|           Iglesia sus funciones de Cabeza, porque precisamente en
 9   I, 13|     íntegro sentido de la palabra, Cabeza de la Iglesia, de la misma
10   I    |                           CRISTO, "CABEZA DEL CUERPO" ~
11   I, 15|            ser considerado como su Cabeza. El -dice San Pablo - es
12   I, 15|             dice San Pablo - es la Cabeza del Cuerpo de la Iglesia43.
13   I, 15|          de la Iglesia43. El es la cabeza, partiendo de la cual todo
14   I, 15|            razón de su excelencia, Cabeza de la Iglesia. Porque la
15   I, 15|           de la Iglesia. Porque la Cabeza está colocada en lo más
16   I, 16|        este título se asemeja a la cabeza. Ya que, para usar las palabras
17   I, 16|          San Ambrosio, así como la cabeza es la ciudadela regia del
18   I, 17|         manera podía dejar sin una cabeza visible el cuerpo social
19   I, 17|       cuanto no existe más que una Cabeza primaria de este Cuerpo,
20   I, 17|       Vicario constituyen una sola Cabeza, lo enseñó solemnemente
21   I, 17|           pueden abrazar a Cristo, Cabeza de la Iglesia, sin adherirse
22   I, 17|             Porque, al quitar esta Cabeza visible, y romper los vínculos
23   I, 18|       vínculo especialísimo con la Cabeza divina de todo el Cuerpo -
24   I, 19|            se vaya a pensar que la Cabeza, Cristo, al estar colocada
25   I, 19|       humano: No puede decir... la cabeza a los pies: no necesito
26   I, 19|          desarrollo proviene de la Cabeza, que es Cristo71. Pero a
27   I, 19|            Cristo Nuestro Señor es Cabeza de su Cuerpo social, hemos
28   I, 20|    conformidad que existe entre la Cabeza y el Cuerpo, puesto que
29   I, 20|            dice Santo Tomás, es la cabeza de los ángeles. Porque Cristo
30   I, 20|          naturalezas, Cristo no es cabeza de los ángeles, porque no
31   I, 21|              21. Es también Cristo Cabeza de la Iglesia, porque, al
32   I, 21|        Santos Padres - así como la cabeza de nuestro cuerpo mortal
33   I, 21|            perfectísimamente en su Cabeza, Cristo. Plugo [al Padre]
34   I, 22|         Cristo Nuestro Señor es la Cabeza de su Cuerpo místico. Porque
35   I, 22|       nervios se difunden desde la cabeza a todos nuestros miembros,
36   I, 22|     conocieron como dictándoles la Cabeza86. Y aun hoy día es para
37   I, 24|        Cristo debe ser considerado Cabeza de su Cuerpo místico, sino
38   I, 25|       describiendo cómo influye la Cabeza en los miembros, Cristo
39   I, 26|            sí, como con su excelsa Cabeza, estando como está todo
40   I, 26|       estando como está todo en la Cabeza, todo en el Cuerpo, todo
41   I, 26|          que mientras Cristo es la Cabeza de la Iglesia, el Espíritu
42   I, 27|           exposición en torno a la Cabeza mística108 quedaría incompleta,
43   I, 27|          del Apóstol: Cristo es la Cabeza de la Iglesia: El es el
44   I, 27|            bienaventurada: Nuestra Cabeza -dice San Agustín - intercede
45   I, 28|         social de la Iglesia, cuya Cabeza y rector es Cristo, se pueda
46   I, 30|            a la manera que Cristo, Cabeza y dechado de la Iglesia,
47   I, 30|       degenerada. Acuérdate de qué Cabeza y de qué Cuerpo eres miembro131.~ ~
48  II, 31|            El mismo [Cristo] es la cabeza de la Iglesia134, enseñan
49  II    |     visible a los ojos de todos la Cabeza suprema que guíe eficazmente,
50  II, 32|         mutuamente y con la divina Cabeza. Porque cuantos somos creyentes,
51  II, 32|         por nosotros143; y Cristo, Cabeza nuestra, acogido por nosotros
52  II, 33|            Dios y a nuestra divina Cabeza. ~
53  II, 34|  abundancia y eficacia encierra la Cabeza, y al perfeccionarse en
54  II, 34|        doctrina de San Agustín, la Cabeza mística, que es Cristo,
55  II, 34|            hombre nuevo es Cristo, Cabeza y Cuerpo, el Cristo íntegro. ~
56  II, 35|       místico de Jesucristo con su Cabeza, Nos parecería incompleto
57  II, 36|      nosotros y con nuestra divina Cabeza, se manifestara a los fieles
58  II, 36|        mismo, al Eterno Padre como Cabeza de todo el género humano,
59  II, 36|            al Padre Celestial como Cabeza de la Iglesia, sino que
60 III, 40|        nuestro Salvador, en cuanto Cabeza de su Cuerpo místico, tan
61 III, 40|         según su doble naturaleza, Cabeza de toda la Iglesia173. Además,
62 III, 41|   dirigidos por una sola y excelsa Cabeza, somos penetrados de un
63 III, 42|          el esplendor de su divina Cabeza y de sus celestiales dotes,
64 III, 43|           por mandato de la divina Cabeza, habrán de dar un día cuenta
65 III, 46|        acerquen con Nos a la única cabeza en comunión de un amor gloriosísimo197.
66 III, 51|        virginal con la dignidad de Cabeza de la Iglesia, pues que
67 III, 51|          Madre corporal de nuestra Cabeza, fuera, por un nuevo título
68 III, 51|      intercesión que de la excelsa Cabeza desciendan sin interrupción -