Cap., N.

 1   I, 6 |    descendientes, junto con la vida terrena, la vida sobrenatural
 2   I, 6 |        con la vida terrena, la vida sobrenatural de la gracia.
 3   I, 8 |        evangélicos, llevan una vida de trabajo entre los hombres,
 4   I, 9 |       con los que atiende a la vida, a la salud y al desarrollo
 5   I, 9 | Bautismo, los que nacen a esta vida mortal no solamente renacen
 6   I    |  herejía o la apostasía. Ni la vida se aleja completamente de
 7   I    |       al llegar el ocaso de su vida, celebrando la última cena,
 8   I, 16|   todos los tiempos espíritu y vida54. Y, además, concedió a
 9   I, 20|    costumbres la doctrina y la vida de Jesucristo, que cuando
10   I, 22|  iremos? Tú tienes palabras de vida eterna85; de tal manera
11   I, 23|    integridad y en santidad de vida. Y cuando los Sacramentos
12   I, 24|        todos los órdenes de su vida, tanto visible como invisible,
13   I, 25|       Iglesia viva de su misma vida divina, da vida a todo el
14   I, 25|       su misma vida divina, da vida a todo el Cuerpo con su
15   I, 25|  atentamente este principio de vida y de virtud dado por Cristo,
16   I, 26|     con su celestial hálito de vida, ha de ser considerado como
17   I, 30|     sin la comunicación de una vida sobrenatural120. Por lo
18  II, 31|   vital de los sarmientos y la vida y la del organismo de nuestro
19  II, 32| vivimos todos también la misma vida en la fe del Hijo de Dios,
20  II, 35|       como a su cumbre en esta vida mortal. ~
21  II, 36|       haga vivir no ya nuestra vida, sino la de Cristo y amar
22 III, 38|        Espíritu divino toda la vida espiritual del cristiano
23 III, 43|    cómo a veces se priva de la vida a los contrahechos, a los
24 III, 45|         hasta el término de su vida mortal, no haya trabajado
25 III, 45|        consagrado a Dios en la vida religiosa, sino también
26 III, 46|        y las angustias de esta vida terrenal, o a los que, ya
27 III, 46|   preocupa más sino que tengan vida y la tengan con mayor abundancia194.
28 III, 48|       Iglesia pueda llevar una vida quieta y tranquila, en toda
29 III, 49|     trabajos y dolores de esta vida presente. Porque así, según
30 III, 51|      que era la fuente de toda vida sobrenatural; ella, la que