«El latido del bosque» es un original y audaz
intento de confrontación de la «vida y milagros » de San Juan Bosco, Don Bosco, con el mensaje de los
libros que componen la Biblia.
A la sombra de cada uno de los
libros bíblicos seleccionados –nueve en total, del Génesis al Apocalipsis
– se toma y
relee cada vez la biografía y obra del «padre y maestro de la juventud» al
completo, y se elijen aquellos pasajes que en su conjunto pueden ofrecer el
perfil más afín al mensaje del libro sagrado.
Así, en «GÉNESIS. Libro de
orígenes y germinaciones » –la primera de las nueve incursiones bíblicas en el bosque– el autor ha querido
indagar lo que hay en Don Bosco de origen y novedad, de semilla sembrada que
despunta, vive, crece y, en su madurez, es capaz de germinar y perdurar en algo
nuevo, remozando de este modo a su mundo en la rutina del diario y viejo
acontecer.
A tal fin se recurre a la poesía, a
la lírica para crear, explicar y comunicar algo a lo que difícilmente se podría
acceder por otras vías de conocimiento. En «El latido del bosque» cada poema está compuesto
por una secuencia de tres, cuatro o cinco pequeños poemas-escenas de las que
emerge, un nuevo relato, la nueva y
verdadera historia que el autor ha querido contar.
El apellido del santo en italiano
–Bosco– proporciona, por transposición, las primeras mimbres –la metáfora, el
escenario y la atmósfera– para este proyecto: el bosque. Desde el punto de vista
metafórico, la imponencia de un bosque se mide sólo por su capacidad de
producir y anidar misterio, y por la potencialidad pedagógica para su
desvelamiento.
Quien accede al corazón del bosque
acaba por confesar: «Percibo,
así, en tu bosque, los latidos». Por esos latidos de los orígenes a los que ahora
recurre como río peregrino a sus propias fuentes, se accede al conocimiento de
claves para la interpretación del presente y el vislumbre del futuro: «La pureza de estirpe
que nos toca, / la fuerza que sostiene nuestras vidas, / la vida que taladra
los futuros / es la propia de las germinaciones». «Nos llega así el futuro como
un alumbramiento».
Carlos GARULO (Loarre –Huesca, España–,
1942) empieza a escribir poesía sólo recientemente y de manera tangencial a su
quehacer profesional. A partir de los años noventa, su producción literaria va
viendo la luz progresivamente. Su primer poemario –Impromptu sobre
teclado veneciano (1991)–
ya fue valorado como «una poesía llena de sensibilidad, sutilmente evocadora y
altamente sugestiva» (Giuliano Soria, Università di Salerno, en Quaderni
iberoamericani,
n° 72).
A Impromptu han seguido, hasta el
presente Música
acordada para unas coplas de mi padre (1993), En el cuerpo del alma (1999), Metáfora final (2000), Tríptico para un
oficio de difuntos (2002),
En los
márgenes y a mano (2002)
y Voz
de piedra (2004).
A propósito de éste último, escribe el poeta y crítico literario Rafael Alfaro
(Granada): «Estos poemas nos hablan de un poeta maduro que sabe conjugar con
sabiduría la realidad y la imaginación, las gestas y la evocación de los
sueños, el pasado, el presente y el futuro.» Exactamente en esa línea de
madurez expresiva se inscribe el poemario que ahora ofrecemos: «GÉNESIS. Libro de
orígenes y germinaciones », el primero de una serie que componen «El latido del bosque».
Una espléndida edición electrónica
de Voz de piedra fue publicada por El Heraldo de Aragón para el día del libro. Hoy
se halla en la web de los Amigos del Castillo de Loarre
http://www.castillodeloarre. org/amigos//LibroVozdePiedra.htm
El resto de títulos forma parte
también de la Biblioteca Internacional Digital Intratext:
http://www.intratext.com/carlosgarulo/
En Barcelona, desde 1972, Garulo compaginó la docencia (Escuela Universitaria
Blanquerna) con la actividad cultural-empresarial (Director editorial de
Edebé). Y en Roma, ciudad en la que reside desde 1991, primero la coordinación
de los medios de comunicación y, más tarde hasta el presente, las universidades
de los salesianos, congregación religiosa fundada por San Juan Bosco a la que
pertenece y que está presente en todo el mundo.
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