Cap.

1      5|    está en la mano de Dios, sosegaos, pues, y mirad por vuestra
2      9|     amparará en su gloria. -Sosegaos, por Dios, señora -respondió
3     14|  como decís, pero por ahora sosegaos y mirad por vos. Don Álvaro
4     18|    yo quedaré amancillada! -Sosegaos, señora -contestó el anciano -,
5     18| entonces don Álvaro -, pero sosegaos -añadió con sonrisa irónica -,
6     19|     le dijo: -Vamos, señor, sosegaos. ¿Quién no ha pasado en
7     32| escondites del corazón.~ ~ -Sosegaos, Andrade -le dijo el obispo
Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License