Cap.

1      5| acostumbrado como estaba a verla ceder de continuo a su voluntad;
2      5|   movimiento de orgullo al verla tan hermosa, en tanto que
3     28|  filas, porque en lugar de verla coronada con sus montañeses,
4     29|   abad de Carracedo quería verla. Desde su aciago desposorio
5     31| descanso de sus penas, sin verla aparecer jamás, ahora cruzaba
Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License