Cap.

1      4|   dijo con su voz enérgica y sonora: -Siempre he estimado a
2      7| rodeaba se alzaba más alta y sonora la voz de su corazón, y
3     22|   maestre con voz reposada y sonora. -El Señor me dará fuerzas
4     28|  medida que trepaban. La voz sonora de Andrade, por mucho cuidado
5     35|   una especie de respiración sonora y anhelosa que parecía hervir