Cap.

1      6|    que rompió en ayes y en gemidos tanto más violentos cuanto
2      7| sólo me devuelve ahora mis gemidos. ¿Qué queréis?, La desesperación
3     11|  las manos lanzando sordos gemidos, y dijo: -Yo no obedeceré
4     19| sino con sordos y ahogados gemidos. Don Álvaro, cuyo pecho
Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License