Cap.

1      8|    Bembibre todo lo penosos y desabridos que le hemos oído decir,
2     24| comenzaba a dar tan amargos y desabridos frutos, que a costa de su
3     27|        Separáronse, pues, más desabridos que nunca, y el señor de
Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License