Cap.

  1      3|           noche la pasaremos en el castillo de Ponferrada -dijo torciendo
  2      3|        llegaron a la barbacana del castillo. Tocó allí don Álvaro su
  3      3|           de que hablamos era este castillo una buena muestra del poder
  4      3|          esta sazón la campana del castillo anunció la hora del recogimiento,
  5      6|           me negará un nicho en su castillo para cuidar de sus halcones
  6      9|          afueras se encaminaron al castillo, sito en una pequeña eminencia
  7     10|             Don Álvaro salió de su castillo muy poco después de Martina,
  8     10|         deseo era llegar pronto al castillo de Cornatel y hablar con
  9     10|          de la montaña la mole del castillo iluminada ya por los rayos
 10     10|            áspera y montaraz, y el castillo mismo cuyas murallas se
 11     10|         los años, el esqueleto del castillo todavía se mantienen en
 12     10|           las obras exteriores del castillo. Iba su ánimo combatido
 13     10|            alcaide de Cornatel. Su castillo de Bembibre no le ofrecía
 14     10|          que conducía y conduce al castillo. Bajó, pues, a la puerta
 15     10|  abrazándole estrechamente. -De mi castillo de Bembibre -respondió el
 16     10|       Castilla; pero llevarla a mi castillo ofrece muchos riesgos para
 17     10|      discreto, porque si a vuestro castillo os la llevaseis o tendríais
 18     10|           piedra, está la mina del castillo, y por allí podéis introducirla.
 19     12|        ayuda, ¡y lo que es más, el castillo que gobierna a semejantes
 20     12|         uno de sus oficiales; y su castillo, en manos de los caballeros
 21     12|   entregado al infante don Juan el castillo y plaza del puente de Alcántara.
 22     14|         una colina dominada por un castillo, y no lejos pasa el río
 23     14| trasportarle con gran cuidado a su castillo. Por último, como los refuerzos
 24     15|          de sus aliados. Aunque su castillo de Bembibre estaba guarnecido
 25     15|            una torre solitaria del castillo, comenzaron una plática
 26     15|            a la sala principal del castillo, mandó a llamar por un paje
 27     15|     todavía por los corredores del castillo. Al ruido, acudieron algunos
 28     15|       afligirme permitiendo que un castillo mío fuese testigo de semejante
 29     15|    caballero en el panteón de este castillo. -No ha de ser así, por
 30     15|          Juan - descansará en este castillo hasta que, restablecida
 31     15|       manifiesto en la capilla del castillo, acompañado del inconsolable
 32     15|          depositó en la bóveda del castillo, en un sepulcro nuevo, los
 33     15|          Millán salió entonces del castillo, y yendo a encontrarse con
 34     16|    peregrinación, subió por fin al castillo de Cornatel y dio parte
 35     19|     ahorquemos de una escarpia del castillo de Ponferrada, para que
 36     20|         con que fue recibido en su castillo de Tordehumos; sobrevinieron
 37     20|           el menos frecuentado del castillo. Allí le sujetaron fuertemente
 38     20|  capitulación mía, no tomasen este castillo. Don Álvaro se quedó pensativo
 39     20|          había dejado dueños de su castillo, no le afligía tanto por
 40     20|      grandísimo dentro y fuera del castillo. Por último, las voces,
 41     21|        entregaré a la puerta de su castillo con todo el honor correspondiente,
 42     21|            a la plaza de armas del castillo, donde el gallardo Almanzor
 43     21|            caballeros, y salió del castillo con el comendador y sus
 44     22|          décadas alcanzaban. En el castillo de Ponferrada se conservan
 45     22|           a la hermosa capilla del castillo, a cuya puerta se pararon
 46     23|       porque se había criado en su castillo y sido el compañero de su
 47     23|            fue que cuando llegó al castillo, su determinación se la
 48     25|          sintió su presencia en el castillo, pues tanto su brazo como
 49     25|   comendador recorrió enseguida el castillo con el mayor cuidado, examinando
 50     25|           el reposo y silencio del castillo, cuyos caballeros, inmóviles
 51     25|           que por aquella parte el castillo era inexpugnable, porque
 52     25|           realidad, para cercar un castillo por su misma situación aislado,
 53     25|            que cae al mediodía del castillo, y amparándose de los matorrales
 54     25|        cambio, los ballesteros del castillo, cuando alguno de los enemigos
 55     25|      extraordinariamente a los del castillo, y a su sombra seguían las
 56     25|            más altos torreones del castillo acompañado del señor de
 57     25|         los caballos que hay en el castillo por la escalera secreta
 58     25|           hasta que la campana del castillo os  la señal tañendo a
 59     25|       dejarais en la barbacana del castillo. Saldaña levantó entonces
 60     26|           segunda vez el mando del castillo: Dominus mihi custos, et
 61     26|            contra la barbacana del castillo, sólo dividida de éste por
 62     26|        abalanzarse a la puerta del castillo, y echándola al suelo, entrar
 63     26|           las herradas puertas del castillo. No bien habían descargado
 64     26|            a rebato la campana del castillo como si doblase por los
 65     26|            a rebato la campana del castillo. Entonces creyeron que ya
 66     26|      prudente acometer fuera de su castillo con la poca gente que lo
 67     26|          delante de aquel terrible castillo. Don Álvaro no sólo cumplió
 68     27|       caballería habían salido del castillo y no venido de Ponferrada,
 69     27|    podremos entrar en ese infernal castillo por el lado del derrumbadero? -
 70     27|         modo de que entremos en el castillo. -Eso haré yo sin las doscientas
 71     27|          que por allí defienden el castillo. Con sus ojos, acostumbrados
 72     27|            del ángulo oriental del castillo paróse Andrade y comenzó
 73     27|             Os digo que de allí al castillo no hay más que una mediana
 74     28|    dominaba el ángulo oriental del castillo, ni parecía empresa asequible
 75     28|          un montañés, muerto en el castillo de resultas de la pasada
 76     28|            llegamos a entrar en el castillo, medrados quedamos. Como
 77     28|           nos acercaremos todos al castillo por donde la otra vez, con
 78     28|       recibido. Volvióse, pues, al castillo con gran priesa y, en cuanto
 79     28|            adelantándose contra el castillo y que no dejó de inspirarle
 80     28|            vez, con la campana del castillo. Carvajal salió a dar las
 81     28|    prolonga extraordinariamente el castillo de ocaso a naciente. La
 82     28|      escalera principal de vuestro castillo de Monforte -replicó Andrade -,
 83     28|         sitiadoras se acercaban al castillo en los términos que dijimos,
 84     28|        hacia la parte oriental del castillo, y la plataforma quedó iluminada
 85     28|            separaba el torreón del castillo -; detenéos en nombre de
 86     28|             quisieron ir contra el castillo y embestirlo a viva fuerza.
 87     28|            que pasase a habitar el castillo, donde sería recibido con
 88     28|       echaron unas cuerdas los del castillo con las que se ató y pudieron
 89     30|           poco a poco con el aéreo castillo de las esperanzas de aquel
 90     30|        rocas y precipicios de este castillo. Por lo que hace a mí, si
 91     30|       pocos días desocuparon aquel castillo que con tanto valor habían
 92     30|     diciendo que ya no teníais más castillo que éste, que os iban a
 93     30|       anchurosa plaza de armas del castillo caballeros, aspirantes,
 94     32|            entró arrastrando en el castillo, arrancada por la mano de
 95     32|          artes en la defensa de su castillo, con notorio menosprecio
 96     33|          sus ojos se fijaban en el castillo de Cornatel, plantado a
 97     33|       también -añadió señalando el castillo con el dedo -. Dos veces
 98     34|          nombre del rey ocupaba el castillo lo dejó al punto en manos
 99     38|            le buscaron por todo el castillo y no apareció; lo único
100     38|           en una de las piezas del castillo. De aquí dedujeron unos
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