Cap.

 1      1|              aunque no sea conde, es noble y rico, y lo que es más,
 2      2|        infancia de aquella joven tan noble, agraciada y rica, a quien
 3      2|            fin hubo de recabar de su noble esposo que ambos jóvenes
 4      2|               de fisonomía abierta y noble, y sus facciones de una
 5      2|      despidamos. Id en paz y seguro, noble don Álvaro, que si pueden
 6      3|     enconaría el odio de que nuestra noble orden va siendo objeto,
 7      4|              daba a su existencia un noble y glorioso objeto de que
 8      4|             injusticia ha agriado su noble carácter. Ellos responderán
 9      5|         conde de Lemus, señor el más noble y poderoso de Galicia, favorecido
10      5|              después de lograr de la noble reina doña María el lugar
11      6|          cerca le tocaba aquel valor noble y sereno y aquella elevación
12      7|          acordar entonces de que era noble, de que penabais por mí,
13      7|         Álvaro. -Id, pues, con Dios, noble caballero, yo recurriré
14      8|            al paso prontamente ya la noble figura de doña Beatriz indignada
15      8|           una resolución digna de su noble energía, respondió: -Yo
16      9|            al arbitrio inventado, su noble alma era incapaz de contribuir
17     10|             alma que privaba a aquel noble busto romano del reposo
18     10|             en aquella figura de tan noble y varonil belleza. Hasta
19     10|             la desdichada pasión del noble mancebo, cosa extraña en
20     10|              del hogar doméstico, el noble ardor de la ciencia y el
21     10|              Álvaro, vuestra alma es noble y no hay cosa que no comprenda,
22     10|             se había encendido, y su noble figura, animada por el fuego
23     11|       aparecerse a su imaginación la noble y dolorida figura de don
24     11|         esposa. -El cielo os guarde, noble don Álvaro; pero no os entreguéis
25     12|              a poner en ejecución su noble propósito, cosa de que con
26     14|           vino al suelo debajo de su noble caballo que, herido también
27     14|           tan buena y un corazón tan noble le hacían infinita falta
28     14|              un caballero de aspecto noble, aunque algo ceñudo habitualmente,
29     15|              mano: -¿Cómo os sentís, noble don Álvaro? ¿Estáis contento
30     15|          duda, su alma, naturalmente noble y recta, le estuvo haciendo
31     15|                Quién no creía a este noble mancebo libre ya de todo
32     15|             de oro. -Muchas gracias, noble señor -respondió él rehusándolo -.
33     16|              había iluminado aquella noble familia, tardó poco en oscurecerse
34     16|              de acuerdo con la de su noble esposo, y aún le conservaba
35     16|            con su valor porque, como noble, era amante de la gloria
36     17| consentimiento... Sin embargo, si el noble conde de Lemus no fuese
37     17|              inmediatamente trajo al noble huésped. El abad, mientras
38     18|           muchas horas. Aquel cuerpo noble y bien formado, dechado
39     18|              huertas de la antigua y noble casa, y fatigada de su corto
40     18|       desgracia ha llegado para esta noble orden! ¡Quiera Dios que
41     18|      ultrajáis a una dama? -Dejadle, noble anciano -repuso doña Beatriz -;
42     18|           semblante modelo de gracia noble y a la par lozana y florida.
43     18|            orgullo! ¡Ah!, ¡por Dios, noble comendador, lleváosle, lleváosle,
44     19|              hombres por jueces. Sed noble y confesad que un arrebato
45     19|               Como obedecisteis a su noble madre cuando el asunto de
46     19|           corazón? -¡Ah!, ¿y vuestra noble casa -repuso doña Beatriz -,
47     19|              hombre tan manchado. El noble proceder de la joven, su
48     21|         escudo de mis armas! Sí, sí, noble Saldaña, don Álvaro está
49     21|            causaría al desgraciado y noble preso semejante aparición!
50     21|                perdonad, perdonadme, noble don Gutierre! -repuso don
51     22|              corazón como un huésped noble, hermoso bien venido a quien
52     22|           pasión por aquel joven tan noble y sinventura se había propuesto
53     22|              campo de la guerra y el noble empeño de defender una causa
54     23|             peligros que cercan esta noble orden. Todavía tienes una
55     24|       embargo, pocas lágrimas. Aquel noble carácter cada día se reconcentraba
56     24|           puede sanar, y con aquella noble altivez y pudor que sienten
57     27|               cuyo carácter franco y noble, se avenía mal con semejantes
58     27|         apego con que miraba aquella noble orden, conociendo la dificultad
59     28|                 Ahí tenéis a vuestro noble y honrado señor! Y diciendo
60     28|              contrariando así su más noble y natural destino. ~ ~ ~ ~
61     29|            contento de su padre y la noble satisfacción que siempre
62     29|              Cornatel? ¿Qué es de mi noble padre y de...? del conde,
63     29|              el abad -, pero vuestro noble esposo ha muerto ayer. -¿
64     29|             conmovido a vista de tan noble desprendimiento y tomándole
65     30|           trayéndole hacia sí. -¡Oh, noble Saldaña! -exclamó el joven,
66     30|         puede tachar de seco vuestro noble corazón? -Así es la verdad,
67     30|             Salamanca, llevado de su noble y santo propósito. El buen
68     31|            el último velo, le dijo: -Noble don Alonso, fuerza será
69     31|              votos, más rendido, más noble y más hermoso que nunca,
70     31| correspondencia dulcísima y de aquel noble orgullo que en todos los
71     32|     individuos, y no desmintieron la noble confianza que en ellos había
72     32|             acusación, la muerte del noble conde de Lemus... ¿Es cierto
73     32|             sin haberme conocido, la noble hospitalidad que ofreció
74     33|           idea de ver a un joven tan noble y pundonoroso sujeto a infamantes
75     34|        agradecidos que quedaban a su noble comportamiento. Paga escasa
76     34|         cabalgadura y se alejó de la noble Salamanca, acompañado de
77     34|            semana, se despidió de su noble huésped y de su interesante
78     34|              anterior conducta, y el noble desprendimiento de Saldaña
79     34|             parte, ningún empleo más noble podía buscarse al poder
80     35|             noticias de Salamanca el noble señor y al punto juzgó que
81     35|     encarecimiento: -Por Dios Santo, noble señora, que le dejéis hacer
82     35|            de Dios. -¿Y vos también, noble don Álvaro? -añadió don
83     35|            con el casco. Por fin, el noble huésped, sosegándose un
84     35|           Villabuena. ¡Salid, salid, noble don Álvaro! ¡Oh, Dios mío,
85     36|         enfermedad se advertía en su noble semblante, pero el pesar
86     36|          quebrantar la fe de vuestro noble corazón. Tomad esta cartera -
87     37|             el sosiego doméstico, el noble orgullo de llevar un nombre
88     38|             vos, padre mío, por este noble y generoso don Álvaro y
89     38|             yo misma. ¿No es verdad, noble don Álvaro? Acercaos, esposo