Cap.

 1      1|           con ella. -Pero hablando ahora sin pasión y sin enojo -
 2      2|    avasalláis mi alma. Nunca hasta ahora os lo había dicho... ¿para
 3      2|          que sois un ángel de luz, ahora lo veo; ¿pero quién, quién,
 4      2|          arrastre esa cadena, pero ahora que por vuestra ventura
 5      2|          vos se encierra. Perderos ahora sería como caer del cielo
 6      3|          parece rendirle homenaje. Ahora ya no queda más del poderío
 7      3|       estima te tiene, fuese causa ahora de tu pesar. Ella se opuso
 8      4|           queréis que yo me mezcle ahora en negocios mundanos, ajenos
 9      4|            puede errar, y si hasta ahora no ha recaído ya el castigo
10      4|     Bembibre, antes confuso, quedó ahora como anonadado y sin contestar
11      5|        puerto de la dicha pudiendo ahora gozarte segura en la ribera! -
12      6|            porque harto claro veía ahora cuán hondas raíces había
13      6|         convento, y os diré lo que ahora no puedo deciros. Dios os
14      7|        labios vuestro nombre. Pero ahora la naturaleza entera se
15      7|            nombre sólo me devuelve ahora mis gemidos. ¿Qué queréis?,
16      8|         los desdichados amores que ahora empezaban a servir de estorbo
17      9|        seguridad de la muchacha. - Ahora es -respondió ésta - cuando
18      9|          pellizco a Martina -, voy ahora mismo a aparejar la torda,
19      9|           con el arado. - Pues por ahora - respondió el labriego -
20     10|          en días más alegres; pero ahora su único deseo era llegar
21     10|          nadie traería ventaja por ahora. -Si yo pudiera esconderla
22     10|            su gloria y majestad. Y ahora -continuó con los ojos casi
23     10|        casi bañados de lágrimas -, ahora está sentada en la soledad
24     11| determinado a semejante paso; pero ahora, tal vez para encender esta
25     11|         caballero. -¿Y qué haremos ahora? -preguntó éste. -¿Qué hemos
26     11|          un sueño de que despierto ahora, y yo quiero volverme a
27     13|     perdido entre los árboles!..., ahora es cuando debo morirme..., ¡
28     14|           Capítulo XIV~ ~ Volvamos ahora a don Álvaro, que bien ajeno
29     14|          hará como decís, pero por ahora sosegaos y mirad por vos.
30     15|        mostrado, ruégoos que desde ahora rompáis la confederación
31     17|           y dijo: -¡Venga el conde ahora mismo, y le daré mi mano
32     17|           muerte, y los sueños que ahora os fascinan serán vuestro
33     18|       aquellas voces de metal, que ahora sólo hablaban de la muerte,
34     19|            obedecer también la que ahora recibían. Aunque no pasaban
35     19|            estuviesen trocados. -Y ahora, don villano -le dijo Saldaña
36     19|            garras como os escapáis ahora, y que los candados que
37     19|           arrebato de dolor. -Pues ahora la ratifico. ¿Qué poder
38     20|            dentro de algún tiempo. Ahora aprenderá a su costa ese
39     20|     provecho de su libertad lo que ahora ni siquiera de lejos se
40     21|         Álvaro, libre estáis desde ahora; ¡dichoso yo mil veces si
41     21|          buena suerte para esperar ahora su benéfico influjo? Siguió
42     22|       tiempos de discordias, pende ahora tu fortuna, ¿cómo quieres
43     22|     Muévale Dios contra el Temple, ahora que no soy más que un soldado
44     22|            de don Álvaro, viéndole ahora persistir en su propósito,
45     22|          río profundo y caudaloso, ahora la profesión de don Álvaro
46     23|           había visto envuelto. -Y ahora -concluyó diciendo la muchacha -
47     23|            por muerto os encuentro ahora en ese hábito? -Nunca le
48     23|         procurando sonreírse, pero ahora que le visto yo, fuerza
49     23|           con enojo -; mi amo sois ahora como antes, y lo seréis
50     24|           por colmo de desventura, ahora le llamaba la suerte a pelear
51     24|         rodeó desde la niñez, pero ahora, con el pie dentro del sepulcro,
52     24|          siempre tan abiertos como ahora! Después de esta breve conversación
53     24|          toda nobleza y poderío, y ahora, desengañado ya en fuerza
54     24|   sentimientos afectuosos y puros. Ahora que las mayores catástrofes
55     25|       Verdaderamente él es tal aun ahora, que sus obras avanzadas
56     25|  respetuosamente. -No todo os diré ahora -contestó el comendador -,
57     26|           entre dientes: -No, pues ahora excusa el conde de venir
58     27|            planta. De todos modos, ahora la inexorable mano del destino
59     27|          que si entonces dije eso, ahora digo otra cosa, que como
60     27|       obligados a serviros. Lo que ahora hacemos es porque no se
61     27|       agravian -respondió Cosme -; ahora nos tenéis a vuestra devoción
62     28|          minas, fácil cosa es, aun ahora, sustraerse a las más exquisitas
63     28|     estorbado el paso -contestó él ahora que no soy sino soldado
64     28|            le dijo: -Razón tenéis; ahora estamos iguales. El conde,
65     28|        dijo al conde -, veremos si ahora os valen vuestras cábalas
66     29|          zozobra y de recelo; pero ahora se había trocado en una
67     30|            Él. ¿Todavía me guardas ahora rencor por lo pasado? -preguntó
68     30|            sol y acechar el llano. Ahora la montaña se ha hundido,
69     31|           como una ninfa cazadora? Ahora ni aun el sosegado y cómodo
70     31|          sin verla aparecer jamás, ahora cruzaba a lo lejos como
71     32|            mordaz -, no os enojéis ahora, ya que entonces de tan
72     32|     vuestra vista para confundiros ahora, ahora que conozco la ruindad
73     32|            para confundiros ahora, ahora que conozco la ruindad de
74     32|            foso de Cornatel, venid ahora a recibir el premio que
75     33|          era totalmente extraña: -¡Ahora sí!, ahora sí que son ellos;
76     33|   totalmente extraña: -¡Ahora sí!, ahora sí que son ellos; míralos
77     33|            poseída de curiosidad. -Ahora llega Nuño y habla con ellos. ¡
78     33|       tirado el gorro al alto?..., ahora todos hacen señas a la falúa
79     36|           dijo asiéndole la mano: -Ahora estoy más sosegada, y puedo
80     36|           miembros marchitos, pero ahora se ha secado del todo. El
81     36|           de hermosa..., ¿qué será ahora cuando vea en mis ojos un
82     37|          aquella hora suprema. Aun ahora que un obstáculo insuperable
83     37|          la esperanza y la ventura ahora que voy a morir! Al acabar
84     37|        mojados con mis lágrimas, y ahora ya no me quedan lágrimas,
85     37|       suerte despiadada!..., morir ahora..., no, no, don Álvaro,
86     38|            la obediencia, tuvieron ahora de fervorosos sus servicios;
87     38|            ocupado muchas veces, y ahora mismo quiero asegurártela
88     38|         apartaba de vuestro lado y ahora de entre los brazos de mi