Cap.

 1      3|             parecer de pasar allí la noche, y, de consiguiente, este
 2      3|           hacer en Cacabelos, y esta noche la pasaremos en el castillo
 3      3|           cuyos muros dan al río. La noche estaba sosegada y la luna
 4      4|            de Carucedo, cuando en la noche se pintan en su fondo todas
 5      4|             medio del silencio de la noche, y preguntad a aquellas
 6      6|          cenar, salió cerca de media noche con pretexto de aguardar
 7      6|       inmediato procurad quedaros de noche en la iglesia del convento,
 8      7|           ordinario duraban hasta de noche. Fácil le fue, por lo tanto,
 9      7|         donde Millán había pasado la noche con los caballos, y montando
10      8|         desmayado y apático, y día y noche había estado trazando proyectos
11      9|           señora!, que en esta misma noche estaré fuera del convento
12      9|       replicó Martina -, porque esta noche tiene que llevarnos a los
13      9|        alegría por el llano. Como la noche estaba ya adelantada, por
14      9|            señora que mañana a media noche me aguarde junto a la reja
15     10|           decir que habéis andado de noche y que vuestra prisa debe
16     10|             Álvaro -, que esta misma noche pienso dar cima a la empresa -
17     10|           sol de las tinieblas de la noche; nosotros abatiremos a los
18     10|          llorando, hilo a hilo en la noche, y sus lágrimas en sus mejillas.
19     10|              tomó, ya muy entrada la noche, la vuelta de Villabuena.
20     11|         noticia de que aquella misma noche, a las doce, don Álvaro
21     11|            le han desenterrado! Esta noche salimos de penas y veréis
22     11|               El viento fresco de la noche y la impetuosidad de la
23     11|            donde llegaron todavía de noche. Por la brecha de la reja
24     12|             que le indicaron aquella noche como la señalada para la
25     13|              una crisis temible. Una noche en que su tía, su madre
26     13|        Blanca del lado de su hija la noche que debía morir; así pues,
27     13|         doloroso trance. Hacia media noche, sin embargo, doña Beatriz
28     14|               Sucedió, pues, que una noche, saliendo los cercados con
29     14|       refuerzo pedido no llegase. La noche estaba muy oscura, los enemigos
30     14|            lado de su amo en aquella noche fatal, separado de él por
31     14|              tremenda refriega de la noche, y heridos la mayor parte
32     14|             dio doña Beatriz aquella noche fatal, y se la llevarás
33     15| desapareciendo entre los velos de la noche, bajó por la angosta escalera
34     15|              Cerca de las diez de la noche serían cuando el mismo judío
35     15|     correspondiente, y aquella misma noche depositó en la bóveda del
36     16|            este fatal estado pasó la noche entera y la mañana siguiente,
37     17|              y salió, por fin, de la noche en que todos creyeron recoger
38     18|              desierto en mitad de la noche. Nadie mejor que ella sabía
39     18|              que la proximidad de la noche comunica a toda clase de
40     18|      caballero -. ¿Os acordáis de la noche de Carracedo? -Sí, me acuerdo -
41     19|             universo en medio de una noche profunda? Tal vez vuestros
42     19|             abren sus cálices por la noche sin dejar de ser por eso
43     20|             que vimos; y en la misma noche Ben Simuel preparó un filtro
44     20|           supuesto cadáver que en la noche después de sus exequias
45     20|              pero pensó que sería de noche, pero luego, al hacer un
46     20|             un gusano oculto. Por la noche veía correr en sueños todos
47     22|              a la suya, la hacían de noche y a puertas cerradas. Cuando
48     24|         flores que al aproximarse la noche cierran su cáliz y recogen
49     25|          entrambos bandos pasaron la noche en sus respectivos puestos.
50     25|        descansó poco en toda aquella noche y continuamente se le veía
51     25|           vio por la oscuridad de la noche, pero su ademán le hizo
52     26|        aderezando a prevención en la noche anterior, y que no habían
53     26|           como pudo, y aquella misma noche volvió a las Médulas, de
54     26|     allegando los dispersos. Aquella noche se pasó entre las voces
55     28|             Aconteció, pues, que una noche se brindó a salir de descubridor
56     28|          refriega, se dirigió por la noche a las Médulas, acompañado
57     31|       natural, en daño suyo. Aquella noche la lenta calentura que la
58     31|       dulzuras del sueño que aquella noche bajaba sobre sus párpados
59     33|            la lleva el viento de una noche? Mi ventura se fue con las
60     33|           alguna que otra hora de la noche. Espero en Dios que mi mejoría
61     35|              desaparecen en una sola noche al soplo mortífero de la
62     35|              cansado de llorar en la noche de mis pesares, y cuando
63     35|      calentura de la enferma aquella noche, y enseguida volvió al lado
64     35|               hasta que, entrando la noche, su respiración comenzó
65     35|      exterior. Estaba muy entrada la noche, y la luna, en la mitad
66     35|            penacho que llevaba en la noche fatal de Villabuena. ¡Salid,
67     35|            del convento como aquella noche fatal y, que sin llegar
68     35|         pudiera esperarse de aquella noche. ~ ~ ~ ~
69     36|             las emociones de aquella noche, se había quedado profundamente
70     36|              y de la calentura de la noche anterior había cedido el
71     36|          Habíale mirado con ansia la noche anterior, pero el velo que
72     36|           tocan ni los vientos de la noche, pero he aquí que cuando
73     36|              va a ser de ellos? Esta noche he tenido una hoguera voraz
74     36|             cubierta del rocío de la noche y como la esposa de los
75     37|            deliquio era profundo; la noche comenzó a mostrar sus estrellas,
76     37|           dejad entrar el aire de la noche, para que se temple este
77     37|              ella propia, se pasó la noche entera. Hacia el amanecer
78     38|              dolorosas escenas de la noche anterior, y que con ojos
79     38|          suspiro .... .. En la misma noche despachó correos el abad
80   Conc|            cabra se perdía a boca de noche en aquellas soledades, y
81   Conc|            recabar de él. Por fin la noche antes de los idus de agosto (
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