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Alfabética [« »] tierna 3 tiernas 1 tierno 1 tierra 76 tierras 6 tigre 3 tímido 1 | Frecuencia [« »] 76 buen 76 casa 76 tenía 76 tierra 75 delante 75 esto 75 mayor | Enrique Gil y Carrasco El Señor de Bembibre Concordancias tierra |
Cap.
1 1| ella es humilde como la tierra, y cariñosa como un ángel, 2 1| habla así de él en esta tierra, sino tú. -Yo no le tengo 3 2| gloria, todo el poder de la tierra me parece poco para ponerlo 4 3| decoro, ¡alegría de toda la tierra! -exclamó con voz solemne, ¡ 5 3| esparcirnos por la haz de la tierra, como el pueblo de Israel; 6 4| por los desastres de la Tierra Santa, y las rencillas y 7 4| desenfreno, acabamos de perder la Tierra Santa, y ya será preciso 8 6| abundante y fertiliza aquella tierra en que la naturaleza parece 9 7| polvo y fragilidades de la tierra. Si por casualidad viene 10 7| en busca de otro en esta tierra de desventuras, y entonces 11 8| hacia un hidalgo de esta tierra; pero nunca pude creer que 12 8| como Caín, errante por la tierra. Al acabar estas tremendas 13 9| trae a estas horas por esta tierra? -Vamos, señor burlón -respondió 14 10| fuerte de su orden en aquella tierra. Era don Gutierre de Saldaña 15 10| vida se había pasado en la Tierra Santa en continuas batallas 16 10| más vivo, pensando en la Tierra Santa que perdían para siempre 17 10| haber sido dueños de aquella tierra milagrosa y haberla perdido. 18 11| padre. La paz de aquella tierra y la propia opinión la habían 19 11| parecían clavados en la tierra, y sujetos por su recíproca 20 12| saliese al punto de la tierra y le entregase las villas 21 12| insolencia que no saldría de una tierra donde era tan natural como 22 13| para mirar otra vez aquella tierra cuyos recuerdos llenaban 23 16| momento. Los bienes de la tierra, los incentivos de la vanidad 24 17| natural, y que así daba en tierra con todas las esperanzas 25 18| eran nativos de aquella tierra? ¿Quién sabe si aquellas 26 18| cuyos huesos descansaban en tierra extraña lejos de los de 27 18| a la casa. Echaron pie a tierra los desconocidos poco antes 28 18| erais todo para mí en la tierra, y en vos se posaban todas 29 18| más perfecta que las de la tierra, sin cesar trabajaba mi 30 19| era difícil que diesen en tierra con dos solos caballeros, 31 19| a un cercano temblor de tierra, se oyó el galope desbocado 32 19| ejercían los caballeros, la tierra los había vomitado, y una 33 19| trabajos? ¿No sabéis que es tierra de paso y campo de destierro? 34 20| y que al punto dieron en tierra con los vanos pensamientos 35 21| Álvaro en las entrañas de la tierra, cual si le cubriera la 36 22| el Temple, cuando cielo y Tierra parecían conjurados en su 37 22| desunión lastimosa que diese en tierra con el poco prestigio que 38 22| oscuridad se derramó por la tierra, el comendador Saldaña y 39 22| quebrantaba; el cielo y la tierra de consuno parecían apartarla 40 24| posaban por instantes en la tierra?... Don Alonso partió de 41 24| aquella caballería de la tierra de España, y los templarios, 42 25| conservar la posesión de la tierra y cerrar ambas entradas 43 25| la escalera está llena de tierra para que no resbalen. Además, 44 26| desde abajo. Estaban pie a tierra y con los caballos del diestro 45 26| muchos, sin embargo, la tierra, y al punto se dispersaron 46 27| las armas de toda aquella tierra concitadas en contra suya, 47 27| sobre el procomún de la tierra y de la corona. El conde, 48 28| consiguiente dio con él en tierra. Don Álvaro se arrojó sobre 49 28| sus brazos, dio con él en tierra tan tremendo golpe, que 50 28| de aquel poderoso de la tierra, no por eso olvidó sus deberes 51 29| descubierta del todo la tierra rojiza y ensangrentada que 52 29| algún tiempo fuera de la tierra y constantemente apartado 53 29| han padecido cautividad en tierra de moros, que los príncipes 54 29| príncipes y señores de aquella tierra conceden la libertad a las 55 29| reclinar ya mi cabeza es la tierra de mi sepultura. ¡Ah! -exclamó 56 30| sucedían, iban dando en tierra poco a poco con el aéreo 57 30| Pues qué te trae por esta tierra? -Yo os lo diré, señor, 58 31| quedasen a su espalda como la tierra de Egipto detrás de su pueblo 59 31| mi nombre de la faz de la tierra. Doña Beatriz le besó la 60 32| ocasión sus esfuerzos y dar en tierra con sus artificios ponía 61 32| aunque nuevo en esta tierra no me es desconocida la 62 33| de Arganza, saltando en tierra y abrazando a uno de los 63 33| embarcadero, donde a poco saltó en tierra su señora en compañía de 64 34| que cuando puso el pie en tierra, después de haberle acogido 65 35| hicieron lo mismo saltando en tierra, pero ya don Alonso y Martina 66 35| Beatriz como el cielo de la tierra. Acabó, por fin, de leerla, 67 35| importa a los potentados de la tierra la suerte de una joven infeliz 68 35| fatigosa jornada hería la tierra con el casco. Por fin, el 69 36| volverá sólo para confiar a la tierra los despojos de su hija 70 36| quinta, donde, saltando en tierra, volvieron a subir en brazos 71 37| vanas son las alegrías de la tierra? ¿Quién nos dijera hace 72 38| postrer esperanza en la tierra, pero no es tu temprano 73 38| antepasados que había ido a la Tierra Santa en aquel hábito, y 74 38| retirado monasterio de aquella tierra, y no faltó, por último, 75 Conc| había sido un poderoso de la tierra. Esto, sin embargo, no dañaba 76 Conc| fraile a un convento de la Tierra Santa, pero habiéndolo entrado