Cap.

 1      1| conversación muy tirada, y como era natural, hablaban de las cosas de
 2      2|        jardín. Don Álvaro, como era natural, fue el primero que habló. -¿
 3      4|          había apresurado, como era natural, a galardonar una orden
 4      5|            hija que, por un impulso natural y espontáneo, se precipitaron
 5      6|              El aire del campo y su natural valor le restituyeron, por
 6      8|           algo más. Sin embargo, su natural violento e impetuoso mal
 7      8|           mi alma! Don Alonso, cuyo natural franco y sin doblez, no
 8      9|         monjas preguntándole con su natural curiosidad qué era lo que
 9     10|       ejecutado su estrago en aquel natural poderoso y enérgico, pero
10     11|        cedían a los que más fácil y natural cabida habían hallado en
11     11|          calma del claustro, tenían natural atractivo a sus ojos. ¿Quién
12     11|        tiernas protestas. Su índole natural era dulce y templada, y
13     12|             sin embargo es una cosa natural. Cuando el señor de Bembibre
14     12|             entender que su energía natural estimulada por la violenta
15     12|      albores del día trocaron en su natural color las pálidas tintas
16     12|          Miranda; pero el rey, cuyo natural ligero y poco asentado fue
17     12|            una tierra donde era tan natural como el más natural de ella
18     12|             tan natural como el más natural de ella y que, en cuanto
19     12|             decir, acompañado de la natural ojeriza y recelo que inspiraba
20     15|            el reino vecino, parecía natural que desconfiasen de la potestad
21     15|            ya que volvéis a vuestro natural papel, sabed que aunque
22     16|            que a veces suavizaba su natural aspereza.~ ~ Como suele
23     16|           Beatriz volvió no ya a su natural robustez, porque esto no
24     16|           El conde de Lemus, con su natural discreción y tino, se ausentó
25     17|              aunque no era sino muy natural, y que así daba en tierra
26     18|            ver que el alegre y vivo natural de la aldeana se había trocado
27     20|             muerte. Nada, pues, más natural que su resistencia a soltar
28     20|      montañas, inclinado por índole natural a vagar sin objeto los días
29     21|         estímulo a sus deseos, cosa natural en los caracteres vehementes
30     22|                 Capítulo XXII~ ~ Un natural menos ardiente, un alma
31     22|                tu dolor es justo, y natural tu determinación; pero no
32     23|         zumba, y la señora, como es natural, más afligida que nunca;
33     24|       distracciones provenían de la natural tendencia de su carácter
34     25|       habituales disposiciones a su natural corriente, y por último,
35     25|          venía a resultar, como era natural, que recibían más daño.
36     26|  aguardiente, y alentándoles con su natural y astuta elocuencia contra
37     26|             oración, conservaron su natural gravedad, y el comendador,
38     26|             Encamináronse, como era natural, contra la barbacana del
39     28|             otro criado del Temple, natural del país, que conocía todas
40     28|     contrariando así su más noble y natural destino. ~ ~ ~ ~
41     29|             pedía; de manera que la natural delicadeza de su alma ninguna
42     29|          abad sin poder enfrenar su natural adustez -, lleno de cólera
43     30|      explicarse, porque su rectitud natural y sencilla desnudaba de
44     31|         Tordehumos, y su discreción natural le daba a entender que en
45     31|        hacer se convirtió, como era natural, en daño suyo. Aquella noche
46     32|        estando presente don Álvaro, natural parecía que de por sí reclamase
47     32|          aquella obra de iniquidad, natural consecuencia de las pérfidas
48     32|           órdenes de su rey y señor natural. Echáronle en cara la altanería
49     33|           de la orden. La elevación natural de su espíritu le hacía
50     33|        monasterio habían trocado la natural serenidad de su alma en