Cap.

 1      3|       vigilias. Vestía el hábito blanco de la orden y exteriormente
 2     10|         con aquel hermoso ropaje blanco que tan bien decía con su
 3     11|       semblante. Como su vestido blanco y ligero resaltaba a la
 4     14|     especie de turbante o tocado blanco en la cabeza. El caballero
 5     18|   caballeros armados de punta en blanco descendían del puerto de
 6     18|       cruz encarnada en el manto blanco y en el escudo los dos caballeros
 7     18|         del valor, todo tenía un blanco, porque todo iba a parar
 8     20|      lejos, una mujer vestida de blanco, unas veces radiante como
 9     22|     Echáronle, por fin, el manto blanco de la orden y entonces le
10     25|  greguescos muy anchos de lienzo blanco y lo demás desnudo menos
11     25|        al punto lo convertían en blanco, y como no siempre los matorrales
12     25|       las hogueras, y su penacho blanco se revestía de un color
13     25|  encarnado al pecho y un pañuelo blanco a la cabeza o con rodados
14     26|        su tienda y en un caballo blanco, donde el terreno lo permitía,
15     26|          a cabeza y con el manto blanco a las espaldas y la cruz
16     26|         un jinete con el caballo blanco de espuma y sin aliento
17     28|       Álvaro, armado de punta en blanco, no podía acosarle con el
18     29|         bien y contento han sido blanco constante de mis deseos.
19     32|       cabeza de la orden, era el blanco de todos los tiros, no por
20     33|          Tenía vestido el hábito blanco de su orden, y en su semblante
21     33|         agraciada con su vestido blanco se dibujaba como la de un
22     35|        de ellos vestía el hábito blanco y negro de la orden de San
23     35| deshechos le caían por el cuello blanco como el de un cisne, y velaban
24     37|        Sí, sí, tráeme mi vestido blanco, porque quiero pasearme
25     37|        descoloridos y su vestido blanco. Asaltóla al mismo tiempo
26     38|        aquel techo, señalado por blanco a las saetas invisibles