Cap.

 1      1|         ni cómo no, ¡paf!, ambos vamos al río de cabeza. ¿Qué os
 2      1|     conoció se sonrió y me dijo: vamos hombre, bien está; todo
 3      3|    desviado de él, y por eso nos vamos convirtiendo en la piedra
 4      9|         echáis a morir, a fe que vamos a hacer un pan como unas
 5      9|          horas por esta tierra? -Vamos, señor burlón -respondió
 6     11| enternecida y enojada le dijo: -¡Vamos, vamos, que ese caso no
 7     11|        enojada le dijo: -¡Vamos, vamos, que ese caso no llegará
 8     11|  volviéndose a su ama, le dijo: -Vamos, señora, porque estoy segura
 9     11|          me arrancase la lengua. Vamos, señora -añadió con impaciencia -;
10     11|          más aprisa que podamos. Vamos, vamos, ¿no habéis oído
11     11|       aprisa que podamos. Vamos, vamos, ¿no habéis oído sus últimas
12     13|      replicó doña Blanca -, pero vamos, sosiégate, amor mío, y
13     15|         quejaba; pero nada oyó. "Vamos, dijo para sí, de esta vez
14     19|          casi risueño, le dijo: -Vamos, señor, sosegaos. ¿Quién
15     21| remordimiento y de la vergüenza. Vamos al punto a su calabozo -
16     23|     pasado desde que te fuiste! ¡Vamos!, aún no se me ha quitado
17     23|       siendo como eres un señor, vamos al decir, te vas a quedar
18     23|      Millán, sino en mis brazos, vamos, abrázame, hombre..., en
19     24|         al valeroso don Álvaro! ¡Vamos, vamos! ¡No me lo pida Dios
20     24|     valeroso don Álvaro! ¡Vamos, vamos! ¡No me lo pida Dios en
21     30|  comendador con interés -, ¿cómo vamos a presentarnos al concilio? -
22     33|        cuesta de Río Ferreiros. -Vamos allá -respondió ella con
23   Conc|     códice latino cuyas palabras vamos a traducir fielmente haciendo