Cap.

 1      1|           tempestad deshecha, y el río iba de monte a monte bramando
 2      1|          no, ¡paf!, ambos vamos al río de cabeza. ¿Qué os figuráis
 3      1|            su caballo y se tiró al río tras de mí. En poco estuvo
 4      1|          fin mi jaco se fue por el río abajo, y yo, medio atolondrado,
 5      3|           armas cuyos muros dan al río. La noche estaba sosegada
 6      3|          reflejos al moverse, y el río, semejante a una franja
 7      3| quebrándose entre los peñascos del río, morían a lo lejos mezclados
 8      4|         por la izquierda corría el río entre los sotos, pueblos
 9      6|        chopos y álamos blancos. El río le proporciona riego abundante
10     10|      derecha se dilataban hasta el río huertas y alamedas de gran
11     12|            a Bembibre, o cruzar el río por el puente de Ponferrada,
12     12|        vagando por las orillas del río hasta que los primeros albores
13     13|            la veo en las ondas del río... ¡tampoco la dicha baja
14     14|       castillo, y no lejos pasa el río llamado Rioseco. La posición
15     22| desgraciado lo había convertido en río profundo y caudaloso, ahora
16     25|            que corona la cuesta de Río Ferreiros, ocupando el camino
17     25|           paso a paso la cuesta de Río Ferreiros, cruzó el riachuelo,
18     27|            y, además, no soy yo el río Sil para no poder volverme
19     31|          de sus miradas. Pasado el río hay una cuesta muy empinada,
20     32|          fuimos testigos encima de Río Ferreiros. Capitaneaba Beltrán
21     33|            lo alto de la cuesta de Río Ferreiros. -Vamos allá -
Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License