Cap.

 1      2|           despidamos. Id en paz y seguro, noble don Álvaro, que si
 2      7|           fuere menester, y estad seguro de que nunca maldeciréis
 3      9|           mejor mensajero, a buen seguro que yo me mueva, aunque
 4     10|          ojos de todo el mundo, y seguro de que la templanza y austeridad
 5     11|          replicó el monje, y vete seguro de que mientras vivas y
 6     15|      desventurada guerra, y estoy seguro de que habrá mirado por
 7     15|          fidelidad estaba él bien seguro. -Eso no importa -replicó
 8     18|          buen palafrenero, que de seguro hubiera respondido si se
 9     18|       negras, con un paso no muy, seguro, se fue acercando a ella
10     21|          y recelos, porque estaba seguro de que don Juan soltaría
11     22|        Jerusalén terrena, escalón seguro y senda de luz para la Jerusalén
12     27|          boquete algo mejor y más seguro. -¿Y cuál? -preguntó el
13     28| fuertemente a las almenas. -¿Está seguro? -preguntó desde abajo una
14     28|         estremecer a don Álvaro. -Seguro como si fuera la escalera
15     32|            lo que vi y pasé, bien seguro de que nadie quite ni ponga.
16     32|          hice bien o mal, pero es seguro que volvería a hacerlo siempre,
17     38|         un rayo de la divina luz, seguro es que las lágrimas se secarían
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