Cap.

 1      7|         que con vuestra piedad divina os compadezcíais de mí. -¿
 2     11|        esperanza es una virtud divina. Estas parece que debían
 3     12|      le había presentado en su divina desnudez y cautivado su
 4     16|      quién no amaba aquel alma divina encerrada en tan hermoso
 5     18|        de la huesa. -¡Justicia divina! -exclamó ella con el acento
 6     18|    mística del amor. Tenía por divina la fortuna de encontrar
 7     29|        de la justicia y bondad divina; pero recobrarle sólo para
 8     29|     tarde para la misericordia divina -contestó el anciano que
 9     29| solemne ocasión, es una virtud divina. -Tenéis razón, padre mío -
10     35|     tiempo que la misericordia divina os sacó de las tinieblas
11     37|       el reflejo de aquel alma divina, que brillaba en sus ojos
12     37|      felicidad. -¡Misericordia divina! -prorrumpió ella con un
13     37| circunstantes -. ¡Misericordia divina! -repitió torciéndose las
14     38|     los míos por un rayo de la divina luz, seguro es que las lágrimas
15   Conc|   santo, porque si esta Virgen divina te ha concedido la salud
Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License