Cap.

 1      3|     contestó el templario -. La vanidad y la ambición secan las
 2      4|        los ojos al cielo -. ¡Oh vanidad de las grandezas humanas! ¿
 3      8|       circunstancias, aunque la vanidad y el cálculo fuesen el móvil
 4      9|         pobre señora!, ¡maldita vanidad!, ¡despreciar a un hombre
 5      9|      hermana con cierto aire de vanidad: - ¡Es mucho hombre este
 6     16|    tierra, los incentivos de la vanidad nunca habían fascinado sus
 7     22|        brevedad de la vida y la vanidad de las alegrías del crimen;
 8     25|       codicia humana y sobre la vanidad de sus recuerdos. Al pie
 9     27|       replicó él con un poco de vanidad mal reprimida -, ¿loco eh?
10     34|         sentimientos un poco de vanidad por haber venido a ser el
11     35| bondadosamente. Más alta que la vanidad de nuestra sabiduría está
12     38|   cuanto doloroso ejemplo de la vanidad, de la ambición y de los