Cap.

 1      5|    Villabuena, donde tenía una tía abadesa a la sazón, entró
 2      6|       el ejemplo de su piadosa tía, contribuirían a mudar las
 3      7|       los ojos de su amado. Su tía, que también había amado
 4      8|     fin, ésta acompañada de su tía y ataviada como aquel caso
 5      8|     con un profundo gemido. Su tía y las demás monjas acudieron
 6      9|      vida. -Dejadla ir, señora tía, porque amas puede Dios
 7     13|   temible. Una noche en que su tía, su madre y el buen religioso
 8     13| sufrido tanto. ¡Y vos también, tía mía! ¿Y mi padre dónde está? -
 9     18|     profesa como la abadesa su tía. Por más señas que...~ ~ -
10     24|        tocaba. El encuentro de tía y sobrina fue triste y aflictivo,
11     31| argumentos de su padre y de su tía, de manera que la misma
12     31|        Despidióse, pues, de su tía y de las buenas religiosas,