Cap.

 1      4|   entonces y le dijo: -Vos sois testigo de que me cerráis todos
 2      9|  hubiera querido librarse de un testigo de vista importuno, pero
 3     15|       que un castillo mío fuese testigo de semejante desgracia!
 4     21|      Núñez, con su pariente por testigo, si no tenía reparo en hacerle
 5     21| cualquier arrebato -; no fui yo testigo de ellos, pero todo el país
 6     24|        siempre la boca de aquel testigo inexorable y terrible, y
 7     30|   quiero ir allá para servir de testigo. Señor comendador, a la
 8     34|          y los sucesos que como testigo presencial podía contar,
 9     36|     solo, y nadie sino Dios era testigo de su flaqueza; pero las
10     38|     alguna vez he odiado, sedme testigo de que me arrepiento y perdono. -