Cap.

 1      3|       toda vez que la chica era rubia azafranada...~ ~ Con la
 2      3|          No hay más? -añadió la rubia azafranada, con ojos provocativos.~ ~ -
 3      8|              Era alta, delgada, rubia, graciosa, pero no tanto
 4      9|        de veinticinco años; era rubia de color de azafrán, muy
 5     10|         una delicia morbosa, la rubia lúbrica olfateaba la deshonra
 6     13|       faldas sonoras, risueñas, rubia la una, morena como mulata
 7     15|     avaricia. Paula era de niña rubia como una mazorca; tenía
 8     16|       lado a Petra, la doncella rubia y taimada, que sonreía discretamente.~ ~ -
 9     17|      costa. Tenía sus planes la rubia lúbrica.~ ~ Don Víctor Quintanar
10     20|         recordaban la cabellera rubia y estoposa de alguna miss
11     21|      contra su cuerpo la cabeza rubia y entre los dedos de la
12     21|      inmortalidad del alma. Era rubia, de un blanco de jaspe,
13     21| preparaban para el convento. La rubia hermosa, con brazos de escultura
14     21| fanatismo deslumbrador; aquella rubia era la perla de su museo
15     27|    calor, don Fermín! -decía la rubia, enjugando el sudor de la
16     28|      demás, él despreciaba a la rubia lúbrica en el fondo del
17     29|        reconocerlo la orgullosa rubia. Era el caso que, en su
18     29|       misma aquel puesto que la rubia lúbrica tanto ambicionaba.
19     29|         crudas con que pintó la rubia lúbrica el asalto del caserón
20     29|         con ojos de idiota a la rubia que enjugaba lágrimas villanas. «¿
21     29|        a una ventana, una mujer rubia, como de treinta años, daba