Cap.

 1      1| conventos ocupaban cerca de la mitad del terreno; Santo Domingo
 2      3|       fondo con las piedras en mitad del pasaje y por más esfuerzos
 3      4|        malbaratado antes, y la mitad del producto de tan loca
 4      4|      su amigo Iriarte. La otra mitad fue destinada al socorro
 5      6|      en medio. De las ocho, la mitad están ocupadas. Alrededor,
 6      6|     cortesano. Mucho más de la mitad del caudal fugitivo de sus
 7      9|   rerum natura; llegó hasta la mitad. Decía bien el poeta, pero
 8     11|        de una piedad maquinal, mitad postiza y falsificada. Las
 9     12|       sermón de cura de aldea, mitad suspiros, mitad eructos
10     12|      de aldea, mitad suspiros, mitad eructos de la vigilia.~ ~
11     15|       de que él no sabía ni la mitad, de vigilias, de sudores,
12     15|      mientras se tambaleaba en mitad del arroyo, gritó: «-¡Ladrones!
13     16|        cigarro abandonado a la mitad por el hastío del fumador.
14     19|    altura, en aquel escenario, mitad pastoril, mitad de novela
15     19|     escenario, mitad pastoril, mitad de novela picaresca, entre
16     21|       la Iglesia militante, la mitad de mi vida entregada a la
17     21|      pienso más que en la otra mitad de mí mismo, que es la que
18     21|      señorito se comía la otra mitad.~ ~ Y así todas las mañanas.~ ~ ~ ~
19     25|        olivo.~ ~ Esto fue a la mitad de la Cuaresma. Vetusta
20     28|    ustedes estarían llegando a mitad del monte... Apenas se han
21     29|     Abroño, que se cruzaban en mitad de la hoz pasando el camino,