Cap.

 1      1|             la yerba había crecido fresca y vigorosa con las últimas
 2      4|         Mosco; soñaba con la gruta fresca y sombría del cíclope enamorado,
 3      5|          lo que ella valía. Estaba fresca Anita. Ni rico había sabido
 4      7|  abundantes rizos negros, una boca fresca y alegre sonreía, unos ojos
 5     11|       crepúsculo; la mañana estaba fresca; de vez en cuando, por vía
 6     11|    señorito -gritó una voz dulce y fresca desde una habitación contigua.~ ~
 7     11|            levantada, tiesa, muda, fresca, sin un pliegue; salió de
 8     12|            de imaginación fuerte y fresca que por vez primera oía
 9     13|           que en aquella hermosura fresca, oliendo a yerba y romero
10     15|            una joven alta, blanca, fresca, de carne dura y piel fina,
11     15|          estaba desierta, la noche fresca; se respiraba bien; los
12     21|           nueva, rumorosa, tersa y fresca. Gorjeos de pájaros y rayos
13     22|          vez más hermosa, de nuevo fresca y rozagante, de formas llenas,
14     26| entusiastas de la gloria reciente, fresca de don Fermín, de su triunfo
15     27|      pájaros, con la sangre sana y fresca que siento correr dentro
16     27|        cerca agua corriente, yerba fresca, leche de vacas..., ¡qué
17     27|          todas las mañanas, por la fresca recorría la huerta y sacudía
18     27|           casa del leñador; es muy fresca y tiene asientos muy cómodos.~ ~ -
19     28|      presentaba risueña, elegante, fresca y viva. «Al fin aquello
20     28|             Ana sonreía, hermosa y fresca con su traje sencillo de
21     28|            helechos, y de la yerba fresca y verde de la otoñada.~ ~