Cap.

 1      1|         obra del humo es la pátina; precisamente el encanto de los cuadros
 2      2|      enemigo que tenía el Provisor. Precisamente el trabajo de maquiavelismo
 3      4|            criterio de doña Camila; precisamente él creía que el Misterio
 4      7|        razón; por algo y para algo. Precisamente tenía entre manos un vastísimo
 5      7|           poco de imaginación..., y precisamente él estaba tan excitado en
 6      9|              de Dios, del alma... y precisamente él quería todo lo contrario.
 7     11|            nombre de sabio, pero no precisamente el de arqueólogo; nadie
 8     12| pensamientos de bucólica religiosa. Precisamente siempre había sido enemigo
 9     13|       aquellas escenas, que sin ser precisamente escandalosas... no eran
10     13|            pensó De Pas; y entonces precisamente fue cuando se encontró con
11     17|           piadosos escrúpulos, pues precisamente ella no frecuentaba semejante
12     17|    frecuentaba semejante sitio... Y precisamente aquella noche...»~ ~ El
13     17|         creo que un buen médico (no precisamente el señor Somoza, que es
14     20|            de la gente lusitana, no precisamente en el cráneo, sino más bien
15     23|        cristianos», estaba pensando precisamente don Pompeyo Guimarán, que,
16     28|            una ventana a la galería precisamente del lado en que estaban
17     29|            quiero salir de aquí; si precisamente... pero en cuanto a lo de
18     30|          quien me lo comunicó exige precisamente que yo dé este paso...~ ~