Cap.

 1      6|        tenue de los mecheros del gas, se quedaba dulcemente dormido
 2      6|      media vuelta a la llave del gas, y dejaba casi en tinieblas
 3      8|      podía llegar a la llave del gas Mesía, el mejor mozo. Los
 4      8|   llegaba todavía a la llave del gas.~ ~ De las tres hijas de
 5      9|           La luz amarillenta del gas brillaba de trecho en trecho,
 6      9|          nueva salían chorros de gas que deslumbraban a los vetustenses,
 7      9|          a tales despilfarros de gas. Don Álvaro veía a la Regenta
 8      9|        le presta la fantasía. El gas no es para prodigado por
 9      9|         noches románticas no hay gas) no deslumbran ni quitan
10      9|         tiendas deslumbrantes de gas.~ ~ Don Álvaro opinaba lo
11     14|        jardín de Páez, la luz de gas que brillaba entre las filigranas
12     14| alumbrada por lejanos faroles de gas macilento. De Pas oyó gritos,
13     19|    encendían dos o tres luces de gas en el salón, y Quintanar
14     20|          relucir los aparatos de gas con que iluminaban la fachada
15     20|         Paz era grande, frío; el gas amarillento y escaso parecía
16     25|          sin los esplendores del gas de las baterías. Pero Anita
17     30|         Los mozos encendieron el gas y continuó el tertulín de