Cap.

 1      1|          como en un espejo, los propios méritos. El beneficiado
 2      4|    osaba ya oponer los impulsos propios a lo que creía conjuración
 3      5|       poco para consuelo de los propios males, para remediar las
 4      8| reaccionario creía resolver sus propios asuntos y en realidad obedecía
 5      9|      mismos se hacen daño, a sí propios se engañan; lo mismo se
 6     12|          pero nada más. Nombres propios casi ninguno: el grosero
 7     12|     hasta lo más íntimo con sus propios intereses y los de su señora
 8     14|   Vegallana donde todas con sus propios ojos -cada cual - le acababan
 9     15|     digna, que le elevaba a sus propios ojos».~ ~ Abrió el balcón
10     16| indulgente a ratos para con los propios defectos y culpas.~ ~ Se
11     18|       toda influencia sobre los propios gustos y aficiones. Aquel
12     20|     asuntos serios que él creía propios de aquella solemnidad. Se
13     20|       domésticos como si fueran propios, hasta ponía paz entre los
14     26|   quiera; estos extremos no son propios... de personas decentes.~ ~
15     29|     ayudarle era satisfacer los propios deseos; hundir al ama, tenerla
16     29|       había visto ella, con sus propios ojos, lo que jamás hubiera