Cap.

 1      1|         se movía; era negra, de raso. Pero lo peor de todo era
 2      1|         de Obdulia. La falda de raso, que no tenía nada de particular
 3      4|     gran mitra dorada y capa de raso y oro, recorriendo el desierto
 4      5|     Restituto Mourelo, canónigo raso a la sazón, decía con voz
 5      8|      después, y últimamente con raso basteado, capitoné que ella
 6      8|        botones ocultos entre el raso, como pistilos de rosas
 7     13|        de los guardamalletas de raso, los cristales prismáticos
 8     18|        prefería mojarse a campo raso, y arrastraba consigo a
 9     19|        la espalda sonrosada, de raso, que él no miraba siquiera.
10     21|     debajo de aquellas capas de raso... El Magistral, perdiéndose
11     21|      las rodillas redondas y de raso en la blandura apetecible.
12     23|      trechos su propia carne de raso entre la holanda, saltó
13     23| Petronila, con una manteleta de raso negro, antiquísima, mal
14     24|       se levantó de su silla de raso carmesí con respaldo de