Cap.

 1      2|  restaurant comían de carne el Viernes Santo, ni uno solo se hubiera
 2     12|        la Audiencia. Todos los viernes de Cuaresma la Real Audiencia
 3     12|       se lució en su sermón de viernes el sinuoso Arcediano. Ya
 4     12| Glocester era la ironía. Aquel viernes memorable, Mourelo se presentó
 5     12|       idolatría. Aquel día, el viernes, estuvo oportunísimo burlándose
 6     18|  tiempo, y hasta los socios de Viernes santo, unos perdidos que
 7     18|       la Territorial todos los viernes de aquel tiempo santo y
 8     20|     los que comían de carne en Viernes Santo.~ ~ Don Pompeyo no
 9     26|   carne en una fonda todos los Viernes Santos.~ ~ «¡Aquel don Pompeyo
10     26|        era irrevocable».~ ~ El Viernes Santo amaneció plomizo;
11     26|        del ateo convertido, el viernes el entierro de Cristo, y
12     27|        otra locura como la del Viernes Santo. Tantas ideas y sentimientos
13     30|  acuerdan ustedes del paseo de Viernes Santo? -preguntaba el barón.~ ~ -