Cap.

  1      1|            educación torcida. Cuando quería imitar, bajo la sotana manchada
  2      1|         contentaba con menos pero lo quería con más fuerza, lo necesitaba
  3      1|              las injurias con que se quería derribar al Provisor, y
  4      1|             aquella con que Bermúdez quería pasar por el hombre más
  5      1|           que él en cuanto una mujer quería marearle con una o dos miradas.
  6      1|        irritaba al Magistral, que no quería aquellos escándalos en la
  7      1|              le mareaba. ¡Y ella que quería seducirle, hacerle suyo
  8      2|             única vez al primero que quería oírle.~ ~ -Por la boca muere
  9      2|     barrenaba con un dedo la frente. Quería aludir a la locura del poeta
 10      2|             sí tan buen bocado, pero quería que a lo menos no se lo
 11      2|    principales, como era la Regenta, quería hacerse hija de confesión
 12      2|             en las damas de Vetusta, quería confundirse con la plebe,
 13      2|            de repente que él también quería hablar al Provisor, y como
 14      2|      Magistral; y doña Visita que ya quería irse antes, cogió del brazo
 15      2|                Ea, se había cansado; quería dar la batalla al libertino
 16      2|             de veras la capilla y no quería más contemplaciones.~ ~
 17      2|              mismo frente al espejo. Quería aquello decir que un Bermúdez
 18      3|              que le daba todo lo que quería, que la apretaba contra
 19      3|             aya y doña Camila. No la quería. Aquella señora aya tenía
 20      3|             que tenía un papá que la quería mucho y era el que mandaba
 21      3|        corría llorando hacia el mar; quería meterse en un barco y navegar
 22      3|             rebelión la desesperaba; quería aplacarla y se irritaba.
 23      3|              alma. En tales horas no quería a nadie, no compadecía a
 24      3|            mala, ya sentía como ella quería sentir; y la idea de su
 25      3|               porque ni era poeta ni quería calentarse al calor de su
 26      3|          todo y conseguirlo todo, la quería, la adoraba sin duda alguna,
 27      4|       viceversa. No era eso. La niña quería ir a tierra de moros de
 28      4|           tampoco era aquello lo que quería Anita; quería marchar de
 29      4|         aquello lo que quería Anita; quería marchar de veras, muy lejos,
 30      4|           ley del mundo, porque Dios quería, tuvo miedo de lo que los
 31      4|              era huir del hombre. No quería más humillaciones». Esta
 32      4|           ocurrió buscar trabajo; no quería trabajar más. Prefirió retirarse
 33      4|           una oposición. El capellán quería dejar bien puesto el pabellón
 34      4|             Pero no bastaba aquello, quería más, quería inventar ella
 35      4|         bastaba aquello, quería más, quería inventar ella misma oraciones.~ ~
 36      5|     preguntas a que ella no sabía ni quería contestar. Estaba sola y
 37      5|              sabían enamorarse, ella quería utilizar, si era posible,
 38      5|         terrible de la voluntad. Ana quería fuerzas, salud, colores,
 39      5|           colores, carne, hermosura, quería poder librar pronto a sus
 40      5|           Bermúdez, que sabía lo que quería decir, o poco menos.~ ~ -¡
 41      5|  caballeritos.~ ~ No era esto lo que quería decir. Bien lo comprendió
 42      5|              comprendió su tía; pero quería más claridad y replicó:~ ~ -¡
 43      5|          solemnemente las viejas.~ ~ Quería emanciparse; pero ¿cómo?
 44      5|           decía el otro.~ ~ Frígilis quería decir frágiles. Tal era
 45      5|              de Presidente de Sala y quería llevarse a su esposa, si
 46      6|      Magistral y la confesión?~ ~ No quería dejar su presa. No siempre
 47      6|            ni durante las vacaciones quería volver a Pernueces, ganoso
 48      6|             que no movía siempre que quería, sino cuando podía. Hablar
 49      7|            una seña a los del corro. Quería decir que callaba por pura
 50      7|        Ronzal parecía gallego cuando quería pronunciar en perfecto castellano.
 51      7|         espejo de la Rigolade. No le quería mal. Le hubiera hecho un
 52      7|           Foja le constaba que no le quería bien ni mucho menos.~ ~ -
 53      7|              le gustan estas cosas), quería ver a Obdulia y a don Saturno
 54      7|          casas pocas veces. Si Mesía quería conseguir algo, no era posible
 55      7|      indispensable.~ ~ Por lo mismo, quería él vencer allí para que
 56      7|        gentileza. Esto era lo que él quería saber a punto fijo. ¿Creería
 57      7|              buen conservador, no la quería en las Universidades.~ ~ «¿
 58      7|          aquellos matices delicados, quería decir Paco), aquel contraste
 59      8|             de Mesía.~ ~ Cuando éste quería castigar a alguno de los
 60      8|            Gran Ópera. Mentía cuando quería deslumbrar al auditorio,
 61      8|              ornato público. Todo lo quería alineado. Soñaba con las
 62      8|             distingue tempora... (no quería decir eso) no tergiversemos,
 63      8|            ergo propter hoc (tampoco quería decir eso). La verdadera
 64      8|                  No era tambor, pero quería dar a entender que había
 65      8|              alegres, no cuando Dios quería, sino ahora y siempre; las
 66      8|          siempre a todos. Pero él no quería ya. Aquello se había acabado.~ ~
 67      8|              fuego. Estaba excitada, quería algo y no sabía qué. No
 68      8|            don Álvaro que Visitación quería precipitar a la Regenta
 69      8|            la virtud la volvía loca. Quería ver aquel armiño en el lodo.
 70      8|             aquellas palabras!~ ~ No quería saber más: o mejor, comprendió
 71      9|            aquel impulso pecaminoso, quería mirarlo de frente. Era inclinación.
 72      9|          revelaba una curiosidad que quería ocultar en vano la Regenta. «¿
 73      9|               Ella apenas le oía, ni quería atribuir a su presencia
 74      9|            alma... y precisamente él quería todo lo contrario. Flammarion
 75      9|           gris; corriente, lo que él quería. Lo principal era que no
 76      9|             que él no se explicaba? ¿Quería dar por nulo todo lo que
 77      9|             el teatro, en el paseo? ¿Quería negar valor a las miradas
 78      9|              no dejarse vencer, pero quería dejarse tentar!~ ~ La idea
 79     10|             doña Rufina, que también quería ver empezar, cedió y se
 80     10|      Quintanar era correccionalista; quería la enmienda del culpable,
 81     10|          olvidada ya de la carta que quería escribir. Le dolía el brazo.
 82     10| jurisconsulto; todo menos un marido. Quería más a Frígilis que a su
 83     10|            aclimatación, que todo lo quería armonizar, mezclar y confundir;
 84     10|        parecían mimos de enfermo; él quería mucho a su mujer, pero a
 85     11|      despacho sólo recibía a los que quería deslumbrar por sabio; en
 86     11|           mucho lo que dijeran, pero quería saber lo que se murmuraba
 87     11|        pensaba sin poder remediarlo. Quería buscar dentro de sí fervor
 88     11|           llegado a confesar a quien quería y cuando quería. Su memoria
 89     11|              a quien quería y cuando quería. Su memoria para los pecados
 90     11|       segundo piso, a sus anchas; no quería ruido de curas y frailes
 91     11|           cruzaba el pecho.~ ~ -¿Qué quería el señorito?, ¿se siente
 92     11|              paseos por el despacho; quería distraerse, sacudir aquellos
 93     11|          ojos sin disimulo.~ ~ -¿Qué quería usted? -preguntó, como pudo
 94     11|              Regenta, o por lo menos quería enamorarla, como a tantas
 95     12|               no expresaba lo que él quería, sino lo contrario, añadió:~ ~ -
 96     12|            comprendido. El Magistral quería decir que si él fuese rico,
 97     12|             Pero ay del sastre si le quería engañar cobrándole caros
 98     12|        punzadas de remordimiento, si quería figurarse la vida de Jesús,
 99     12|          imágenes; huía de ellas, no quería quebraderos de cabeza. «
100     12|                   Qué era aquello?», quería decir la mirada del Magistral,
101     12|     dieciocho años se le ocurrió que quería ser desgraciada, como las
102     13|           éste, según malas lenguas, quería el estanco para una su ex-concubina.~ ~ -¡
103     13|          Siempre se quedaba solo; si quería decir algo a la Regenta,
104     13|              Pas?» No lo sabía, y no quería marcharse sin averiguarlo.
105     13|             Banco. Era una broma que quería darle a Mesía; quería ver
106     13|            que quería darle a Mesía; quería ver al confesor y al diablo,
107     13|            emborrachan...~ ~ Paco no quería perjudicar a Mesía en sus
108     13|             que se suplía era Anita. Quería meterle a don Álvaro por
109     13|           Ana disputó con su marido; quería ir a reconciliar, se lo
110     13|              de la Regenta; si no le quería bien, era por considerar
111     13|           entregándose a don Fermín, quería desafiar el peligro y se
112     13|           comprendía perfectamente. «Quería decir el Magistral que cuando
113     13|        confianza, ya se sabía». Esto quería decir que el Marqués y la
114     13|            inclinación de cabeza que quería decir:~ ~ -¡Perfectamente! -
115     13|            una censura desvergonzada quería decir todo lo contrario:
116     13|              cal y canto. «¡Ea!, que quería derribar a San Pedro; y
117     13|            derribar la iglesia, pero quería exclaustrar a las hijas
118     13|          dicho. Todos hablaban; Paco quería también secularizar a las
119     13|              por una debilidad, y no quería más debilidades. ¿Qué iba
120     13|             Le dio ira el sentirlo. «Quería decirse que aquella mujer
121     13|            convencida, don Álvaro no quería vencerla por capricho, ni
122     13|     respetable estorbo. Pero ella le quería, estaba segura de ello,
123     13|            estaba segura de ello, le quería con un cariño filial, mezclado
124     13|         olvidar que don Fermín no la quería ni la podía querer para
125     13|               que no sospechaba cómo quería pagar Obdulia aquella vida
126     13|           con las piernas atadas: no quería que se le viesen los bajos.~ ~
127     13|             el cadete; si don Álvaro quería buscar el desquite de la
128     13|          abanico cerrado en la mano. Quería significar así su deseo
129     14|             Mourelo.~ ~ -Y yo que no quería creer a usted cuando me
130     14|             qué no se iba? Porque no quería dejarlos pasar sin verlos;
131     14|              venganza.~ ~ El Rojo no quería correr: protestaba.~ ~ -¡
132     15|         mojigangas a las caricias, y quería a su hijo mucho a su manera,
133     15|          noche le tomó ojeriza, pero quería casarse con él. De aquella
134     15|             Paula hacía de él cuanto quería, le manejaba mejor que a
135     15|         ansiaba lo mismo que para él quería su madre: el seminario,
136     15|     perjuicio del escándalo. A veces quería Fermín ayudarla, intervenir
137     15|          para pagarle la carrera; lo quería teólogo, nada de misa y
138     15|            aquella santa casa. No le quería jesuita. Le quería canónigo,
139     15|             No le quería jesuita. Le quería canónigo, obispo, quién
140     15|            que era malo! Su madre le quería mucho, a ella se lo debía
141     15|            más borracho, más de raíz quería cortar. En vano su hija
142     16|           evitarlo. Ella, Visita, no quería renunciar al placer de ver
143     16|            que lo había descubierto, quería gozar aquellos extraños
144     16|              era cosa más vehemente. Quería ver a la Regenta, a la impecable,
145     16|            abismos oscuros, donde no quería caer; sentía tristezas profundas,
146     16|             que ella espontáneamente quería decir; lo principal, lo
147     16|             indómitos. Sí, lo que él quería era una afición poderosa,
148     16|          absoluto imposible? Además, quería que su interés por doña
149     16|             pasaba, pero que volvía, quería vencerla, para no padecer
150     16|      aldabonazos de la neuralgia que quería enseñorearse de aquella
151     16|    inclinarse sobre la barandilla si quería oírle, que sí quería aquella
152     16|              si quería oírle, que sí quería aquella tarde.~ ~ ¡Cosa
153     16|      preferencia, que la Marquesa no quería ocupar nunca, en las plateas
154     16|            precioso. De todas partes quería sacar provecho don Frutos,
155     16|         volví a ver si dormía..., si quería algo..., y creí que era
156     17|           insistió Glocester, que no quería en presencia de don Fermín
157     17|          Ninguno. ¿Cómo dominarla si quería sublevarse? No había modo. ¿
158     17|       infinito, el Magistral, que no quería marcharse sin hacer algo,
159     17|              la catedral esta tarde. Quería decirle, y por eso he venido,
160     17|        interesaba saber cómo seguía, quería decirle que no creo conveniente
161     17|              o casi todo lo que ella quería dar a entender, se decidió
162     17|           explicado latamente lo que quería dar a entender con lo de
163     17|            por el Magistral, a quien quería agradar a toda costa. Tenía
164     18|              hacía más que lo que él quería, y no echaba de ver que
165     18|         corazón, a quien no sabía si quería tanto como a su Anita del
166     18|            de él a los pocos a quien quería. Visitaba pocas casas y
167     18|          estimaba, respetaba y hasta quería todo lo que era menester,
168     18|             figuras de yeso ahumado, quería volver a su propedéutica
169     18|            bien. Dejadme a mí.~ ~ No quería confesar que se tenía por
170     18|           entregada al Magistral. No quería aquella conversación; se
171     18|       presentarse, que era lo que él quería, lo que él necesitaba. Verdad
172     18|             él lo necesitaba, porque quería hablarla, decirle que aquello
173     18|      sometidos a descuento; dijo que quería salir de aquella vida de
174     19|             olvidarse a sí mismo, no quería más tiempo de servidumbre,
175     19|              aquellos pecados de que quería acusarse; era relator la
176     19|           eran torcidas, miserables: quería abusar de la confianza de
177     19|           don Víctor. «Pero ¿y si no quería? ¿Si se contentaba con estar
178     19|              de las personas que más quería en Vetusta, a saber: su
179     19|            el padre, ya que no se le quería oír como hermano. Había
180     19|           exterior y bullanguera. No quería censurar, no quería ver.~ ~
181     19|               No quería censurar, no quería ver.~ ~ Pero a sí misma
182     20|             él se declaraba neutral: quería decir que le era indiferente
183     20|              pero mal educado. No le quería bien. «¡Ese es panteísta! -
184     20|            se decía que el Magistral quería seducir, y en camino estaba,
185     20|             no desmayaba. «Ya que él quería perderse, allí estaba ella
186     20|              en su humildad, que más quería parecer cortesía que virtud
187     20|              Guimarán!~ ~ Don Álvaro quería que el ateo volviese al
188     20|         poder pasar del exordio, que quería original, sin afectación,
189     20|         vista gorda. Y por supuesto, quería don Frutos ir a ese mundo
190     20|              que estaba sereno, pero quería que muriese el Magistral,
191     20|            proyecto de conquista.~ ~ Quería observar en el rostro de
192     21|            aquel espíritu. Pero ella quería escribirle; de palabra no
193     21|            pudiera guiarla como ella quería; yo, más débil, recibí más
194     21|      confesaban los dos hermanos; no quería pensar en esto, no quería
195     21|            quería pensar en esto, no quería sustos de conciencia ni
196     21|          peligros de otro género, no quería más que gozar aquella dicha
197     21|              la verdad y todo..., no quería más que hundir el alma en
198     21|             pensaba el Magistral, no quería decirse a sí mismo la Providencia;
199     21|         primeros meses. Aunque tanto quería a su confesor, Ana muchas
200     21|              si no fuera porque ella quería tener contento al Magistral,
201     21|         mejor lo que el Magistral le quería decir al hablarle de actividad
202     21|          sobre la piel de tigre. Aún quería más dureza, y separaba la
203     21|           con fuego en la carne, que quería beber el dolor desconocido,
204     21|             Anita, su querida Anita, quería convertirle a la piedad
205     21|          ausencias o enfermedades. «¿Quería discutir por pasar el rato?
206     21|       inconveniente. En la muerte no quería pensar, porque eso le ponía
207     21|      Frígilis lo negaba». En fin, no quería pensar en la muerte. Pero
208     21|              pero, ¡Dios mío!, él no quería quebraderos de cabeza. Ya
209     21|          aire fresco. Su pensamiento quería elevarse, volar al cielo,
210     21|             noticia, ya sabía lo que quería; no era cosa de perder el
211     21|              el alma.~ ~ «Oh, no; no quería volver a empezar. Ella era
212     21|             sanción divina. Antes no quería pecar por dignidad, por
213     21|         piedad del lado por donde él quería llevarla. «Menos contemplación
214     21|            sonriendo, que él también quería confesarse con ella. «¿Creía
215     21|               Cada cual hacía lo que quería. No estaba doña Paula, no
216     22|             era de la misma opinión; quería trato, conversación, amena
217     22|         infierno Quintanar, «pero no quería prescindir por completo
218     22|            tierra». «Y sobre todo no quería que el fanatismo se enseñorease
219     22|               Y no hay más remedio». Quería que le consolase el reflexionar
220     22|           presa. Por todo lo cual no quería ni verle. Pero, sin querer,
221     22|           aquella flaqueza: «ella no quería» en cuanto mandaba en su
222     22|             le anunció Celestina que quería verle el señor Carraspique.
223     22|             interrumpió Foja, que no quería desperdiciar el arma que
224     23|            como si entendiese lo que quería el corazón de la Regenta,
225     23|             que no podía, ni tal vez quería, impedir que los de atrás
226     23|             señora que un su hermano quería descubrir y matar, y don
227     23|             su lado, sobre el lecho. Quería la infeliz desechar las
228     23|           carne rebelde y desabrida; quería palabras dulces, intimidad
229     23|   avergonzaba vagamente el quererlo, quería... no sabía qué... a que
230     23|            santo, no se sabía, no se quería saber, pero en casa del
231     23|            aquella señora...?». Esto quería decirle, pero un gesto del
232     23|          siempre le sonaba bien. Eso quería ella, que el Magistral mandase,
233     23|           Ana contenía el llanto que quería saltar a la cara.~ ~ -¿Qué
234     23|             pero no importaba, ahora quería desahogar. «¡Ay!, no era
235     24|              enérgico marido «que no quería que su casa fuese un nuevo
236     24|              sí?»~ ~ No lo sabía; no quería saberlo. No quería atormentarse
237     24|         sabía; no quería saberlo. No quería atormentarse más.~ ~ «El
238     24|             pasaba ante sus ojos. No quería reflexionar. Al gritrar
239     24|               no consiguió lo que yo quería..., hacerme olvidar... lo
240     24|             adelante. Lo primero que quería averiguar era lo del otro,
241     24|        Álvaro, cójala usted...~ ~ No quería abdicar su dictadura el
242     25|            Arcediano. Aquella mirada quería decir «venciste, ahora sí,
243     25|              puerta. Ignoraba adónde quería ir, le faltaba en absoluto
244     25|          tenía miedo del aire libre, quería un refugio, todo era enemigo. «
245     25|           sopor le embargó el ánimo. Quería detener el tiempo. Ya deseaba
246     25|              volvió a sus paseos. No quería conversación. La de Rianzares,
247     25|            de la sala.~ ~ -Lo que yo quería, que nos viéramos en seguida.
248     25|        entendían esto... La más pura quería otra cosa». Y pasaban por
249     25|             apretaba el paso. «Yo la quería para mi alma...» «Y su cuerpo
250     25|              que perderla. Porque la quería entera... Es mi mujer...,
251     25|          marido. «¡Era su padre! ¡Le quería como a su padre! Hasta se
252     25|            hacía de una tabla lo que quería. ¡Y qué limpieza!»~ ~ Ana
253     25|          muchas cosas. Don Fermín la quería para sí...~ ~ «Todo aquello
254     25|            del Magistral no podía ni quería... Le debía eterna gratitud...,
255     25|             en sus provocaciones. No quería venderse al sofisma de la
256     25|              estaba seguro». Pero no quería brusquer -según pensaba
257     25|           nos veríamos».~ ~ «Además, quería él prepararse para la campaña.
258     25|              a su modo la Regenta, y quería que aquella ola de piedad
259     25|             de piedad la arrastrase, quería ser molécula de aquella
260     25|           arranque de suicida... Sí, quería matar dentro de ella la
261     25|             circunspecto, mirado...; quería volver al fuego de la pasión,
262     26|         señor Magistral!»~ ~ «No, no quería más luchas religiosas. Ya
263     26|              es tan angelical que no quería darme un susto, pero yo
264     26|              en seguida. Don Pompeyo quería confesar, pero con De Pas
265     26|          decía que sólo al Magistral quería decir sus pecados y declarar
266     26|             enfermo. Todo inútil. Él quería al Magistral; la voz interior
267     26|              crea usted que yo no le quería a usted mal, pero como mi
268     26|             le había remitido. Él no quería mal a nadie, pero lo cierto
269     26|           ruegos del ex-regente, que quería ver, sin ser visto, lo que
270     26|        humildad y dulzura aparentes: quería decir Vae Victis! La de
271     26|               suavemente irónica, no quería decir: «Venciste, Galileo»
272     27|              fija la atormentaba. Si quería huir de ella, se la recordaba
273     27|              una tarde entera.~ ~ Si quería consolarse con la religión
274     27|          pura religión cristiana. No quería ella ni apostatar, ni filosofar
275     27|                  una esperanza... no quería pensar de qué... Pero ello
276     27|       canónigo en cuanto el canónigo quería demostrarle que además era
277     27|              y su hija mayor, que no quería correr con aquellos locos;
278     27|     Ripamilán, Bermúdez, que tampoco quería correr, Benítez, el médico
279     28|         Magistral al Marqués, que no quería dejarle marchar en aquel
280     28|         quemar el mundo entero si se quería hacer justicia de una vez!»~ ~
281     28|            cochero.~ ~ Los rayos que quería le esperaban arriba dispuestos
282     28|      desafiar la tempestad. El barón quería más quedarse, pero tuvo
283     28|        aquella declaración, si se le quería mal, si se había puesto
284     28|              aquel modus vivendi; no quería volver a las andadas, temía
285     28|             su amigo, nuevo hermano, quería decir y aprobaba su prudencia.~ ~
286     28|          Mesía. Quintanar era feliz; quería que lo fueran todos los
287     28|         Álvaro había dicho que él se quería morir. No pedía nada, pero
288     28|               No pedía nada, pero se quería morir. Ana en todo el camino
289     29|            después de charlar cuanto quería, Quintanar solía levantarse,
290     29|            hizo a Mesía una seña que quería decir claramente:~ ~ «Me
291     29|         Nunca había sido más feliz. ¿Quería satisfacer el amor propio
292     29|       dejarse adorar por buen mozo. ¿Quería satisfacer caprichos de
293     29|             no buscaba ella esto; le quería por buen mozo, por burlarse
294     29|       guapetona y por orgullosa»; le quería por vanidad, y en cuanto
295     29|            uñas a la señora ¿qué más quería ella? Todas las noches pasaba
296     29|         Petra, en la mano, y si ella quería, si a ella se le antojaba, ¡
297     29|          engañado ella, pero esto no quería reconocerlo la orgullosa
298     29|              Petra que don Fermín la quería a ella ahora después de
299     29|              el pecho.~ ~ Doña Paula quería comerse con los ojos el
300     29|            que iba a hacer, que ella quería servirle a él, servir a
301     29|         fingiendo humildad y miedo; «quería ver el gesto que ponía aquel
302     29|            la atención del canónigo; quería mandarla callar, pero no
303     29|             queja, ni un movimiento! Quería correr, buscar a los traidores,
304     29|            padecer al canónigo, pero quería más, quería continuar su
305     29|           canónigo, pero quería más, quería continuar su obra; que la
306     29|         apuntado al fugitivo. «Antes quería conocerle». No se contentaba
307     29|         dudaba?, pero antes... antes quería meditar, necesitaba calcular...
308     29|          ánimo de don Víctor, que no quería moverse, ni sentir, ni pensar,
309     29|             como la siente un padre; quería castigar, quería vengarse,
310     29|              padre; quería castigar, quería vengarse, pero matar era
311     29|             pero no la aborrecía; no quería, no podría matarla. Al otro
312     29|              el fondo del alma él no quería ya vengarse, quería castigar
313     29|            él no quería ya vengarse, quería castigar como un juez recto
314     30|             para subir a su casa. No quería llamar. «Iban a abrirle,
315     30|            luchó sin duda? Porque te quería..., porque te quiere...,
316     30|                Frígilis tenía prisa, quería dejar a don Víctor cuanto
317     30|           negaba a mí mismo, pero te quería para mí; quería, allá en
318     30|              pero te quería para mí; quería, allá en el fondo de mis
319     30|          respiro sin pensar en ello, quería poseerte, llegar a enseñarte
320     30|             caserón de la Rinconada. Quería saber algo, espiar los ruidos...,
321     30|              se le respetaba y hasta quería? Nadie le llamaba. No debía
322     30|         pisando como un fantasma, lo quería él en aquel instante con
323     30|         morir no la asustaba; lo que quería era morir sin desvanecerse
324     30|            el terror del infierno... Quería llorar allí, donde había
325     30|           placer entre las lágrimas; quería encontrar al Magistral de
326     30|            juzgaba emisario de Dios, quería fe, quería caridad... y
327     30|         emisario de Dios, quería fe, quería caridad... y después el
328     30|         vientre. No podía hablar, ni quería. Temblábale todo el cuerpo;
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