Cap.

1      8|      algunas provisiones de la despensa; mandaba a la tienda por
2      8| despedazado. Allí cerca, en la despensa, gallinas, pichones, anguilas
3      8|       según su género. Aquella despensa devoraba lo más exquisito
4      8|  muerta de envidia con aquella despensa, exposición permanente de
5      8|       arcones; era digno de la despensa; y Pedro, altivo, displicente,
6      8|   dormitorio en lo que hoy era despensa. Sabía el Marquesito andar
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