Cap.

  1      1|            yo! -dijo el monaguillo, casi escupiendo las palabras;
  2      1|           de obreros había surgido. Casi todas las calles de la Encimada
  3      1|           por lo menos, era triste, casi miserable, como la limpieza
  4      1|          vertederos de la Encimada, casi sepultadas en las cloacas,
  5      1|          anchos pliegues, al flotar casi al ras del pavimento, tornasoles
  6      1|           cuadro que miraban estaba casi en la sombra y parecía una
  7      1|             El Magistral encontraba casi todos los días a don Saturnino
  8      1|       novelas que saboreaba sucedía casi siempre que eran casadas
  9      1|         autoridad, que era absoluta casi, no conseguía sujetar aquel
 10      2|     atrevido a dudar de la castidad casi secular de don Cayetano.
 11      2|             por lo demás buen mozo, casi tan alto como el pariente
 12      2|             pocas personas, señoras casi todas, de alta categoría,
 13      3|           habían hablado poco; todo casi se lo había dicho Ripamilán
 14      3|             la enternecía. Después, casi siempre, había tenido grandes
 15      3|           el lomo rizado, ocultando casi todo el rostro en la lana
 16      3|      manteca mojado en lágrimas.~ ~ Casi siempre comía el pan de
 17      3|              su doncella, asustada, casi desnuda, se abrió la colgadura
 18      3|            empeñó en que Quintanar -casi siempre le llamaba así -
 19      3|           no consideraba que estaba casi desnuda?»~ ~ -Es que...
 20      3|       Estimaba en poco su destreza; casi nadie sabía de ella. Lo
 21      4|        duelo.~ ~ La estancia estaba casi a oscuras; por los grandes
 22      4|            Por aquella época era él casi sansimoniano. Emigró Ozores
 23      4|             algunas veces al Real y casi siempre a paseo con algunos
 24      4|            Eran de esos hombres que casi nunca han hablado con mujeres.
 25      4|       leyendo; aún estaba aturdida, casi espantada por aquella voz
 26      4|                 Ana, sentada lejos, casi hundida y perdida en una
 27      5|                 Es decir, que estoy casi en la miseria».~ ~ Sus derechos
 28      5|             de la aristocracia eran casi todos libertinos más o menos
 29      5|            deliciosa pereza que era casi el único placer en aquella
 30      5|       habían quedado en el estrado, casi a oscuras, suspirando, rodeadas
 31      6|          Jugaban muchos forasteros, casi todos empleados.~ ~ Es un
 32      6|           que aquéllos desaparecían casi todas las noches y los grabados
 33      6|             llave del gas, y dejaba casi en tinieblas la estancia.
 34      6|       género en la prensa local?~ ~ Casi todos los días salía a luz
 35      6|       enganchados por el parentesco casi todos los vetustenses. Esta
 36      6|             que dormían despiertos. Casi siempre callaban.~ ~ No
 37      7|       pálido, de ojos pardos, fríos casi siempre, pero candentes
 38      7|          las frases de efecto nada. Casi podía anunciarse lo que
 39      7|              yo pago la callada.~ ~ Casi siempre pasaba él allí por
 40      7|            y elegante deja vestidos casi nuevos a sus doncellas,
 41      7|             exquisita sensibilidad, casi casi por virtud. Pero esta
 42      7|        exquisita sensibilidad, casi casi por virtud. Pero esta virtud
 43      7|             sigiloso culto externo, casi siempre mudo, sin más elocuencia
 44      8|          elecciones, cuando muchos, casi todos, le creían manejando
 45      8|            condición que ella creía casi universal en los maridos.
 46      8|            pero todos eran cómodos; casi todos servían para acostarse;
 47      8|             aventurilla y se añadía casi siempre:~ ~ «-Lo más odioso
 48      8|        amarillentas, otras de asar, casi rojas, manzanas de oro y
 49      8|          sufragio. «¿Y qué? ¿No son casi todos colonos míos? ¿No
 50      8|            Y, a pesar de las burlas casi irrespetuosas del pinche
 51      8|    consejeros, se lo decían todo, o casi todo; se hablaban en voz
 52      8|              al teatro, iban juntas casi siempre, aunque Ana iba
 53      8|            Ya tenía él en sus ojos, casi siempre apagados, las chispas
 54      9|            con tornasoles azulados, casi negros, parecen de tupido
 55      9|             por luces de bengala, y casi entre sueños oía a su lado
 56      9|           obsesión estúpida que era casi un dolor, absorbía toda
 57      9|           del paseo, a viva fuerza, casi arrastrado por sus amigos.
 58      9|       pronto».~ ~ En Vetusta llueve casi todo el año, y los pocos
 59      9|             vuelo. Los mancebos son casi todos catalanes; pero pronuncian
 60      9|     corrección. Son amables, guapos casi todos. Los más tienen la
 61      9|            el ancho zaguán. Estaban casi a oscuras. Hacía algunos
 62     10|             pie; estaba impaciente, casi airada. Miró a la llama
 63     10|          plaza de toros, una sangre casi negra, muy espesa y con
 64     10|          como un mar de betún. Ana, casi delirante, veía su destino
 65     10|             no tenía conciencia.~ ~ Casi tocando con la frente de
 66     10|             balcón... No estará, es casi seguro, pero, ¿si estuviese?» ¿
 67     10|         erre... Volvemos a Vetusta, casi pasando por encima de la
 68     11|          sabiduría no deslumbraba a casi nadie, y así la mayor parte
 69     11|           Provisor de arriba abajo; casi nadie había visto más que
 70     11|             uno de sus movimientos, casi tendida de brazos sobre
 71     11|      doblado, se volvió de repente, casi tendida de espaldas sobre
 72     11|             Mientras había escrito, casi por máquina, una defensa,
 73     11|         completo una mujer tan alta casi como el Magistral y que
 74     11|        pared.~ ~ Petra se repuso y, casi con altanería, contestó:~ ~ -
 75     12|              Don Robustiano hablaba casi como un filósofo cuando
 76     12|       piedra y los demás de castaño casi podrido; y después de un
 77     12|           maravillas de su virtud y casi le atribuyeron milagros.
 78     12|               En limosnas se le iba casi todo el dinero que le daba
 79     12|          cátedra del Espíritu Santo casi todos los días, despertó
 80     12|           nada más. Nombres propios casi ninguno: el grosero materialismo,
 81     12|           grande; el recinto estaba casi en tinieblas, tinieblas
 82     12|        largos y estrechos, lamiendo casi con la llama los pies del
 83     12|            Fermín tenían por asunto casi siempre o la lucha con la
 84     12|        hastiado, mustio, inútil.~ ~ Casi siempre se olvidaba de decir
 85     12|           mucho y a todas les decía casi lo mismo. Además, era demasiado
 86     12|       litigantes, de pretendientes, casi todos muy afeitados, todos
 87     12|             de aparentar modestia y casi estrechez, le tenían alejado
 88     13|    vergüenza; se creían humillados, casi en ridículo. Muchacho había
 89     13|             delante de su madre.~ ~ Casi a viva fuerza habían hecho
 90     13|      definido, transparentes, fríos casi siempre, que de pronto se
 91     13|          tampoco; comía lechuga con casi todos los platos y todo
 92     13|           al Arcipreste. Ripamilán, casi oculto entre las faldas
 93     13|       Vetusta los ociosos, que eran casi todos, murmuraban de lo
 94     14|           clérigos, viejos o pobres casi todos, protestaron y acabaron
 95     14| próximamente, los curas se quedaban casi solos en el Espolón; pero
 96     14|       encuentro. El Deán no hablaba casi nunca, y paseando, menos.
 97     14|              Un niño flaco, pálido, casi desnudo, tomó la punta del
 98     14|           viniendo sobre su cabeza, casi tocándole con las alas diabólicas.
 99     14|            por la parte del Corfín, casi rozando la cresta más alta
100     14|             medio de él sonó claro, casi estridente, el chasquido
101     15|         espalda; los ojos, apagados casi siempre, echaban fuego ahora,
102     15|             mazorca; tenía los ojos casi blancos de puro claros,
103     15|        otros, y al fin no le pagaba casi nadie. Paula, que había
104     15|            del juego que dominaba a casi todos. Detrás de unas tablas,
105     16|           era que la Regenta soñaba casi todas las noches con él.
106     16|             la obsesión pecaminosa, casi a despreciar la tentación,
107     16|             vencía». Pensaba esto y casi lo decía con los ojos. Se
108     16|            capital. En lo que están casi todos de acuerdo es en que
109     16|       recibidas con desconfianza en casi todas partes. Pero con motivo
110     16|            del público, no reparaba casi nunca en el efecto que producía
111     16|             al papel; la proximidad casi sobrenatural de Tenorio,
112     16|            Audiencia, que me jubilé casi por no firmar más sentencias
113     16|         ellas, vio de repente, y ya casi dormido, la figura vulgar
114     16|   comprendió que Petra mentía. Ella casi siempre llamaba a su marido
115     16|            y hasta el estilo dulce, casi cariñoso de la carta era
116     17|           una salida de tono que ya casi sentía y cuya causa de ningún
117     17|         cualidades, por ejemplo, es casi profanación, no se trata
118     17|      entendía su confidente todo, o casi todo lo que ella quería
119     17|         elogios las frases fuertes, casi duras del Magistral.~ ~
120     17|             este familiar lenguaje, casi jocoso, del Magistral, con
121     18|           Notaba Ana con tristeza y casi envidia que en general los
122     18|        otoño, lo más del invierno y casi toda la primavera. Cada
123     18|      servidumbre miserable; y ahora casi le odiaba; él la había casado;
124     18|           no por modo grosero, sino casi elegante, hablaba, brillante
125     18|            la ocasión dificilísima, casi imposible, de un ataque
126     18|           venganza... ¡Y además era casi imposible! Pocas veces se
127     18|       reprensión de las que en tono casi irrespetuoso, avinagrado,
128     19|       sentía padeciendo mucho, pero casi gozaba con tal dolor, que
129     19|        momento en la alcoba de Ana; casi nunca se sentaba, y hasta
130     19|      respirar en la atmósfera fría, casi viscosa, de los subterráneos
131     19|         Víctor, parándose otra vez, casi al oído de don Álvaro, añadía -:
132     19|           complacerle. Se merendaba casi siempre al aire libre, contemplando
133     19|         inteligente, y se apoyaba y casi recostaba en Frígilis como
134     19|           el teatro y en el sermón. Casi todos los días tenían ocasión
135     19|     soporífero, entró en su tocador casi avergonzada de haber estado
136     20|       tierra eran muy poco íntimas, casi nunca veía una mesa bien
137     20|              Se hablaba de mujeres. Casi todos echaban de menos la
138     20|            Las trazas del amor eran casi siempre malas artes; era
139     21|           verla; pero no se sentaba casi nunca. Estaba cinco minutos
140     21|             sentir un placer sutil, casi voluptuoso en aquella soledad.
141     21|             en retórica mística. Ya casi sabía de memoria algunos
142     21|      anafroditas las más, hombrunas casi en gestos, líneas y contornos,
143     21|        vetustense algunas de ellas, casi todas iniciadas en los misterios
144     21|         expresaba bien el fanatismo casi inconsciente de un alma
145     21|         piel de tigre, con los ojos casi siempre cerrados, gozaba
146     21|       balcón mirando al cielo. Ella casi nunca reparaba en él; no
147     21|              Ripamilán no los usaba casi nunca. No quedaba más canónigo
148     21|         puro inverosímil inofensiva casi.~ ~ La Regenta había despreciado
149     21|            él perdería el prestigio casi sobrenatural de que estaba
150     21|          pero causaba ahora hastío: casi se deseaba la rama escueta,
151     21|             una amistad misteriosa, casi mística, hacían desear a
152     22|             y malvados».~ ~ Pálido, casi amarillo, agitado, muy nervioso,
153     22|         tarde en tarde, la Marquesa casi nunca, y así de todos los
154     22|            de Barinaga; estaba allí casi siempre hasta la hora de
155     22|         execración». Pero nada más. Casi nadie se atrevía a dejar
156     22|            en que vivía don Santos, casi enfrente de la casa del
157     23|             Regenta y a don Álvaro, casi juntos, aunque mediaba entre
158     23|             vacío. Tuvo ella frío y casi miedo a la sombra de un
159     23|    Magistral con tono de mal humor, casi con ira.~ ~ Y embozándose
160     23|           reputó, se le aparecieron casi como una forma de la tentación
161     23|             vaya usted tranquilo... casi todo lo que tenía que decir...
162     24|           de su brazo, hermosísima, casi contenta, pese a todos los
163     24|           las más famosas comedias, casi siempre con la espada en
164     24|           Daba la casualidad de que casi todas las niñas nobles de
165     24|       aquella araña de cristal, que casi tocaba con la cabeza, era
166     24|             narices, tosió, se puso casi negro, medio asfixiado y
167     24|     encontró.~ ~ Ana había olvidado casi la polka; Mesía la llevaba
168     25|         carlistas y liberales, pero casi todos iban a misa a ver
169     25|            común, aquella elevación casi milagrosa de un pueblo entero
170     25|                 Y por qué? Tal vez, casi de fijo, por aprensiones
171     26|           carne lasciva, a oscuras, casi sin aire que respirar, sin
172     26|            cuando el ánimo decaído, casi inerte, no tiene fuerza
173     26|          saber por qué, impaciente, casi con fiebre, Quintanar se
174     26|            los ojos, otros morenos, casi negros, de pelo en matorral,
175     26|        negros, de pelo en matorral, casi todos cejijuntos, preocupados
176     26|              Caminaba cerca de Ana, casi a su lado en la fila derecha,
177     27|                 Leyó la primera que casi sabía de memoria. La leyó
178     27|         letra de la Regenta se hace casi indescifrable para ella
179     27|             medio de una procesión, casi casi del brazo de Vinagre! ¡
180     27|        medio de una procesión, casi casi del brazo de Vinagre! ¡Y
181     27|         estaba allí Mesía, como era casi seguro, todas las ventajas
182     28|          Pepe, donde venían juntos, casi sentada ella encima de él,
183     28|           alrededores del Vivero. A casi todas asistieron los Marqueses
184     28|              si tratándose de otros casi le hacían sonreír, en la
185     28|             con suprema resolución, casi con ira pensó:~ ~ «Este
186     29|          que le queda de cuando fue casi santa... Pero si Ana se
187     29|    comodidad que gozaba de su amor. Casi siempre se veían en casa
188     29|         hora señalada para la cita. Casi todas las mañanas Quintanar
189     29|           Dudó un momento... estuvo casi resuelta a preguntar...
190     29|           tejados de un rojo sucio, casi pardo, de la ciudad triste,