Cap.

  1      1|           santa iglesia catedral y Provisor del Obispo. El delantero
  2      1|       había acercado por detrás al Provisor y procuraba seguir la dirección
  3      1|          mirado por el anteojo del Provisor, sabía que era de poderosa
  4      1|        prisiones. En tales días el Provisor era un huracán eclesiástico,
  5      1|  aristocracia. Por todo lo cual el Provisor mira al barrio del Noroeste
  6      1|      escondites salió, al pasar el Provisor, como una perdiz levantada
  7      1|          que se quería derribar al Provisor, y le envidiaba por lo que
  8      1|         Fermín de Pas, Magistral y Provisor de la diócesis...~ ~ -¡Oh! ¡
  9      1|        deseos de besar la mano del Provisor, pero la mirada del marido
 10      1|        ante la Divinidad o ante el Provisor).~ ~ Afortunadamente, según
 11      2|          de...~ ~ La presencia del Provisor contuvo al señor Arcipreste,
 12      2|         carcajada general. Sólo el Provisor se contentó con sonreír,
 13      2|        buscar su testimonio.~ ~ El Provisor no estaba allí más que para
 14      2|         los supuestos cohechos del Provisor, de su tiranía, de su comercio
 15      2|       cordial enemigo que tenía el Provisor. Precisamente el trabajo
 16      2|   tropezado en el trasaltar con el Provisor, se había dirigido hacia
 17      2|      ignoraba cuándo se sentaba el Provisor y cuándo no. La Regenta
 18      2|           también quería hablar al Provisor, y como en casos tales no
 19      2|      fundarse en este descuido del Provisor. Tomó agua bendita en una
 20      2|            fue desaire -repetía el Provisor dejándose llevar, y con
 21      3|       palabra la hermosa dama y el Provisor, y nunca había pasado la
 22      3|        lejos del círculo en que el Provisor reinaba. Éste visitaba poco
 23      7|               Su amigo de usted el Provisor, era hoy la víctima.~ ~
 24      7|            el verdadero pecado del Provisor era la simonía».~ ~ El Marquesito,
 25      7|           o seis años que lleva de Provisor; la curia de Palacio no
 26      8|           doña Paula, la madre del Provisor, que nunca había querido
 27      9|           No es esto ridículo?» El Provisor había sonreído con la voz.~ ~
 28     11|    jactarse de conocer la casa del Provisor de arriba abajo; casi nadie
 29     11|          defendían la honradez del Provisor, consistía en recordar la
 30     11|           ha visto a la criada del Provisor comprar salmón, y besugo
 31     11|            de su mortal enemigo el Provisor -. ¡El mundo entero...!
 32     11|          la casa contigua a la del Provisor; y como da la picarísima
 33     11|          que, según él, le hace el Provisor? ¿Qué tiene que ver eso,
 34     11|            yo enemigo personal del Provisor. ¿Reparto yo dinero por
 35     11|           un... un Magistral... un Provisor... un Candelas eclesiástico.~ ~
 36     11|         vestir a otro.~ ~ -Pues el Provisor desnuda a todos los santos
 37     11|           favorito de la madre del Provisor, doña Paula. Se apellidaba
 38     11|           se había acercado más al Provisor, y estirando el cuello,
 39     11|           de su sueño; ni al mismo Provisor le hubiera consentido media
 40     11|        llamaba, colectivamente, al Provisor y a su madre. En cuanto
 41     11|         Aquel Usía hizo sonreír al Provisor, que lo creyó muy oportuno.~ ~ -¿
 42     11|           doña Paula, la madre del Provisor. Tenía sesenta años, que
 43     12|          al tute. La presencia del Provisor interrumpió el juego. Los
 44     12|       Obispo de Vetusta, dejaba al Provisor gobernar la diócesis a su
 45     12|           abandonaba en brazos del Provisor para todo lo referente al
 46     12|       calzado no se conocieran. El Provisor todos los días le pasaba
 47     12|      penitencia había derrotado el Provisor al Obispo.~ ~ Cuando Camoirán
 48     12|          humilde Obispo a quien el Provisor en cuanto entró en el salón
 49     12|           llevaba en el nombre. El Provisor despreciaba el tal círculo.~ ~
 50     12|          en adivinar la cólera del Provisor y le abrumaba a chistes,
 51     12|            No tiene tal! -gritó el Provisor, perdiendo un estribo por
 52     12|          salieron a la calle, y el Provisor entró, dejando atrás pasillos,
 53     12|          aun en el ánimo del señor Provisor. Bien iba a probarlo ahora
 54     12|           cosa de envidiosos, y el Provisor sabía que Contracayes (el
 55     12|           había visto enfrente del Provisor, a quien temía por los rayos
 56     12|          cura con un gruñido, y el Provisor no contestó siquiera.~ ~
 57     12|         acostumbrado al estilo del Provisor, que nunca era más erudito
 58     12|          cruel.~ ~ Cuando entró el Provisor, disminuyó el ruido; los
 59     12|           lo oyen ustedes -dijo el Provisor en voz alta, para que se
 60     12|       metal y siempre el lucro del Provisor, el de su madre, iba agarrado
 61     12|          cuestiones turbias que el Provisor acostumbraba resolver como
 62     12|         tuvo allí que pensar si el Provisor se habría vuelto loco, ni
 63     13|            murmuró:~ ~ -¡Ah, señor Provisor...!~ ~ -Gracias a Dios,
 64     13|      bromas; pero ya veras como al Provisor le saben a cuerno quemado -
 65     13|          dicho así en una carta al Provisor, no era cosa de traerle
 66     13|         casa.~ ~ No había visto al Provisor entrar. Visita se acercó
 67     13|            Don Álvaro ya miraba al Provisor con prevención, ya le temía;
 68     13|        prevención, ya le temía; el Provisor no sospechaba que don Álvaro
 69     13|           estaba poniendo varas al Provisor?» Esto que no lo notaban,
 70     13|            Mesía sin el amparo del Provisor.~ ~ No hablaron más. Se
 71     13|          fría que mediaba entre el Provisor y los Vegallana. Bien lo
 72     14|              Ven ustedes? El señor Provisor opina lo mismo que yo; dice
 73     14|          venidas eran indignas del Provisor del Obispado; esto lo pensó
 74     14|       delante del Ratón. Al ver al Provisor, todos, menos el Rojo, le
 75     15|            Lo sabe todo», pensó el Provisor. Cuando su madre callaba
 76     15|           Y salió del despacho. El Provisor hizo un gesto de paciencia
 77     15|           te sientas? -preguntó al Provisor su madre.~ ~ -No tengo apetito...,
 78     15|     resultado de sus esfuerzos, al Provisor de Vetusta. El mundo era
 79     15|            usted y su madre, señor Provisor... ¡Ladrones!»~ ~ Barinaga
 80     15|            diciendo:~ ~ -Sí, señor Provisor, es usted un ladrón, y un
 81     15|         tirano de la Iglesia, este Provisor... es un ladrón, y lo sostengo...
 82     15|           la madera. No abrían. Al Provisor le consumía la impaciencia. «¿
 83     15|            culpar de su miseria al Provisor. «Es claro -dirían los partidarios
 84     15|      pecados! -dijo a media voz el Provisor, con los ojos clavados en
 85     16|          que ella temía era que el Provisor, por hacer guerra al otro -
 86     16|    contrarrestar la influencia del Provisor. Visitación y Paco Vegallana,
 87     17|          siguió a las palabras del Provisor se oyó la respiración agitada
 88     17|           en que había recibido al Provisor.~ ~ -¿Ha venido el señor? -
 89     18|         que le enfriaba el alma al Provisor y le quitaba el sueño.~ ~
 90     18|     espinoso, solía enderezarle su Provisor. El buen Fortunato estaba
 91     18| familiarmente contra la sotana del Provisor, salió al pasillo con lentitud,
 92     19|             Entonces fue cuando el Provisor vio con su catalejo, desde
 93     20|           el odio de don Santos al Provisor y a doña Paula. «¡Era escandaloso,
 94     20|           fama contra la honra del Provisor. Don Santos alborotó la
 95     20|            duraban las visitas del Provisor al Caserón, las visitas
 96     20|      despotismo que se achacaba al Provisor. En el Casino tampoco se
 97     20|            día entraba en casa del Provisor a dar parte de las murmuraciones
 98     20|          vez se habló de colgar al Provisor y demás clerigalla.~ ~ Quien
 99     20|       Álvaro solía cruzarse con el Provisor; y se saludaban con grandes
100     20|          ayudara a desacreditar al Provisor, y considerando que iban
101     20|       sobre todo... muera el señor Provisor..., el...~ ~ -¡Muera!, ¡
102     20|            contado la historia del Provisor tal como la narraba la leyenda
103     20|           había gritado: «Muera el Provisor», encogió los hombros, se
104     20|         capitulares (así dijo) del Provisor. Se sabían muchos escándalos
105     21|          la llevó Petra a casa del Provisor; la recibió Teresina sonriente,
106     21|             qué satisfecho está el Provisor?~ ~ Y contestaba Glocester,
107     21|            Le parecía que era otro Provisor aquel de quien el público
108     21|        Aquella mañana de agosto el Provisor la señaló como una de las
109     22|         perífrasis aludía al señor Provisor el diplomático Glocester.~ ~
110     22|         Vetusta que, por culpa del Provisor, se habían pegado y desafiado
111     22|            dudó ningún enemigo del Provisor fue que la culpa de aquella
112     22|          por comparar el poder del Provisor en el caserón de los Ozores
113     22|          golpe que hizo temblar al Provisor en aquel alto asiento en
114     22|            se indignaban contra el Provisor, todos maldecían al autor
115     22|         decir pestes del otro, del Provisor: así creía servir a la buena
116     22|      señores.~ ~ -No, no, si es el Provisor déjele usted que entre,
117     22|          otros muchos enemigos del Provisor visitaban de vez en cuando
118     22|         pudrirá en la tienda... El Provisor les prohíbe comprar aquí...
119     22|        manos en cruz, se acercó al Provisor.~ ~ -Por Dios, Fermo, por
120     22|          señor, locuras! -rugió el Provisor sacudiendo la cabeza.~ ~ -¡
121     22|            se conspiraba contra el Provisor. El ex-alcalde se multiplicaba,
122     22|            judío, se debe al señor Provisor.~ ~ -Es claro.~ ~ -Evidente.~ ~ -¿
123     22|           de cualquier enemigo del Provisor que venía a compadecerse
124     22|               El tiro va contra el Provisor -manifestó un lampiño, de
125     22|        como un perro por culpa del Provisor, había renegado de la religión
126     22|          la religión por culpa del Provisor, había muerto de hambre
127     22|          sacramentos por culpa del Provisor».~ ~ «Y ahora los revolucionarios,
128     22|                    Y por culpa del Provisor...»~ ~ «No se puede estirar
129     23| discretamente dos pasos. Al ver al Provisor escapar y embozarse con
130     23|            dudaba de la virtud del Provisor, nadie la discutía. Si alguno
131     23|              Ana miró espantada al Provisor... Parecía que no comprendía
132     25|          había sido injusta con el Provisor pensando de él tan mal y
133     26|          salieron al encuentro del Provisor, cuyo rostro relucía con
134     26|       Guimarán, en vista de que el Provisor no parecía, llamaron al
135     26|  estrechaba la mano enguantada del Provisor, éste, sin poder traer su
136     26|            religión.~ ~ -¡El papel Provisor sube! -decía Foja furioso
137     26|            verdad era que el papel Provisor subía mucho más de lo que
138     26|  pregonando el celo apostólico del Provisor, su tacto, su influencia
139     26|       creía que el misticismo y el Provisor eran agua pasada que no
140     26|           más que para dar alas al Provisor. Lo que ha hecho la Regenta
141     27|           del petimetre. Vestía el Provisor balandrán de alpaca fina
142     27|         hablaba a las entrañas del Provisor y de Petra, ambos aldeanos.
143     27|    ilustres.~ ~ -Mire usted, señor Provisor -dijo Vegallana -, la fiesta
144     27|        Víctor, al monte! -rugió el Provisor.~ ~ Y la voz terrible fue
145     28|           del leñador! No creía el Provisor en una Providencia que aprovecha
146     28|       tantas horas en el pecho del Provisor. Aquellos latigazos los
147     28|          criminal, la conducta del Provisor y noble y caballeresca la
148     28|            no había que fiarse del Provisor, etc., etc.~ ~ -Sí, Ana,
149     28|         por completo rompía con el Provisor.~ ~ «Me conozco -pensaba -;
150     28|           Por todo lo cual pudo el Provisor atreverse a insinuar aquel
151     29|            espía. Cierto es que el Provisor le prometió para muy pronto
152     29|        buenas amigas. La madre del Provisor conocía la estrecha simpatía
153     29|        había que decírselo todo al Provisor, porque en saliendo de aquella
154     29|              a recibir a Dios!» El Provisor sintió una carcajada de
155     30|          la tarima del altar, y el Provisor dentro del confesonario.~ ~