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Alfabética [« »] poblada 1 pobladas 1 poblados 3 pobre 126 pobrecita 12 pobrecitos 3 pobres 36 | Frecuencia [« »] 127 lado 126 horas 126 pensar 126 pobre 125 muchas 125 pompeyo 124 manos | Clarín (Leopoldo Alas) La Regenta Concordancias pobre |
Cap.
1 1| barrio noble y el barrio pobre de Vetusta. Los más linajudos 2 1| plebe vetustense, demasiado pobre para poder habitar las barriadas 3 1| despreciaba; la envidia de aquel pobre clérigo le servía para ver, 4 1| fervorosa contrición del pobre hombre. ¡Y que le dijeran 5 2| apestaba a brea. Pero el pobre lugareño seguía diciendo 6 3| había más suavidad para la pobre niña. Entonces debía de 7 4| seducciones sin cuento, honrada y pobre. Ésta fue la madre de Ana 8 4| tomar el sol».~ ~ Él sí era pobre, y más cada día, pero achacaba 9 4| con las manos en cruz. La pobre muchacha se aburría mucho 10 4| aquel pánico pasó, y la pobre niña sin madre sintió dulce 11 5| poder de criados aquella pobre niña, huérfana y enferma, 12 5| asilo. Sabía que estaba muy pobre. Su padre, pocos meses antes 13 5| descansaba, vestida, sobre su pobre lecho, saltó de él a las 14 5| conversación de las tías, la pobre huérfana no se hubiera atrevido 15 5| ve recoger a un pariente pobre, ¿para qué? para ahorrar 16 5| mucho a Anita, porque era pobre. Para ellas la hermosura 17 5| doña Anuncia - porque era pobre; pero ella les tomaba la 18 5| En Vetusta la juventud pobre no sabe ganarse la vida, 19 5| no podía estar en aquel pobre rincón la realidad del sueño, 20 7| divertirse (ya sabes lo que a la pobre le gustan estas cosas), 21 7| eficaz que ella conoce. El pobre Bermúdez sería feliz, dado 22 7| bromas y se despidió.~ ~ -¡Pobre diablo! -dijo Mesía.~ ~ - 23 8| menudo a hacer compañía a la pobre señora que se había quedado 24 8| ya ve usted! ¡Sólo que al pobre Marqués, por supuesto, no 25 8| chasco que se llevaría el pobre Joaquinito Orgaz, que había 26 8| el río Celonio velaba un pobre aldeano tripulando miserable 27 8| lecho, pero no quedaba de la pobre niña ni una prenda, ni un 28 8| Virgen...!~ ~ -Creo que la pobre siente mucho no tener un 29 9| aquellas confesiones. Decía el pobre hombre que se sabía de memoria 30 9| propias desdichas. «Yo soy más pobre que todas éstas. Mi criada 31 10| voluptuosa frescura', aquel pobre Mr. Brooke se había casado 32 10| y nos coge el luto de tu pobre tía Águeda que se fue a 33 11| me diga: el Magistral es pobre y cuanto se murmura de cohechos 34 11| había sabido antes?»~ ~ El pobre don Cayetano era hombre 35 11| consentía que su hijo, su pobre Fermín, que para ella siempre 36 11| quisieran coger en una trampa al pobre Fermo?» Estas malas artes, 37 11| de su secreto entre en mi pobre morada; yo soy un hombre 38 12| señor Magistral, que la pobre señorita no está de cuidado?~ ~ - 39 12| continuó el doctor - que mi pobre Carraspique está supeditado 40 12| hierro había dominado al pobre santo de cera. El hijo, 41 12| todavía a vueltas con el pobre Voltaire; de los modernos 42 12| pocos meses no había un pobre en todo el Ayuntamiento 43 12| que no hagamos caso del pobre don Segundo, el cura de 44 13| coquetear con el clérigo, y al pobre Bermúdez, enamorado de la 45 13| prestaríamos..., ya ves... el pobre don Víctor...~ ~ -¡Ya se 46 13| objeto despellejar a la pobre Obdulia. Ripamilán citaba, 47 14| mientras le daban a la pobre joven el Señor. Hacía mucho 48 15| hacia la puerta:~ ~ -La pobre no sé cómo tiene cuerpo.~ ~ -¿ 49 15| qué sé yo! Está muerta la pobre.~ ~ -¿Y a qué ha ido? -contestó 50 15| alma!~ ~ -¿No nos dejó tu pobre padre muertos de hambre 51 15| Paula arrancó de una vez al pobre párroco de Matalerejo, el 52 15| Autoridad civil; pero el cura es pobre. Paula veía pasar por sus 53 15| a un hospital por loco y pobre.~ ~ Aquel imperio fue el 54 15| es claro, como soy un pobre... Vete, déjame con esta 55 15| por fuerza.~ ~ -Porque soy pobre... ¡Ingrato! -dijo Barinaga, 56 15| pudiera enviarle a aquel pobre viejo la taza de té por 57 16| maestro Zorrilla.~ ~ La pobre Regenta estuvo elocuente; 58 16| le pesaba de engañar al pobre don Víctor, porque le reservaba 59 17| dar una peseta a un niño pobre para comprar un globo de 60 17| por el estilo, al ver a la pobre novicia, a Sor Inés, caer 61 17| en que regaló a un niño pobre un globo de colores. ¿Qué 62 17| a veces la palabra de un pobre cura de aldea encierra en 63 18| chillona, como canturia de pobre de solemnidad. Molestaba; 64 18| estar compadeciéndose de un pobre niño perdido en los hielos..., ¡ 65 18| Señor -le dijo llorando un pobre pescador de barba blanca, 66 19| Frígilis... y don Álvaro. El pobre Ripamilán era invitado, 67 20| sabía cómo explicarlo el pobre don Frutos -. «Ello venía 68 20| parroquial, ese clero honrado, pobre, humilde..., pero el alto 69 21| preguntaba doña Paula.~ ~ Era un pobre o uno del pueblo. Nunca 70 21| inútiles había sufrido el pobre perrero! Ahora le halagaba, 71 21| Para qué perseguían a aquel pobre don Fermín si ya había muerto? 72 22| doña Paula y su hijo; el pobre don Santos, se moría sin 73 22| alimentación. Además, hoy día el pobre don Santos ya no tiene dinero 74 22| Barinaga; harto tiene el pobre con morirse de hambre y 75 22| Petronila. ¿Para qué molestar al pobre don Víctor? Ya que amistades 76 22| santo a sus ojos y ser un pobre cuerpo de barro que vive 77 22| utilizar en beneficio del pobre mártir aquella abnegación 78 22| tiempo dejar en la sombra al pobre don Santos Barinaga, al 79 22| humanidad ultrajada. El pobre don Santos Barinaga, víctima 80 22| el que mata de hambre al pobre ciudadano señor Barinaga, ¡ 81 22| miseria y de la enfermedad del pobre anciano, ya tenía bastante; 82 22| espalda y se puso a medir la pobre estancia a grandes pasos, 83 22| no aflija usted a la pobre Celesta. Hablemos de otra 84 22| Fermín padecía», pensaba el pobre don Francisco, y sin querer, 85 22| cura de la parroquia; el pobre es un bendito, un fanático 86 22| última parte de su vida el pobre Barinaga. Ahora los ratones 87 22| esto es una iniquidad: ese pobre viejo ha muerto de hambre, 88 22| delito del Magistral. Aquel pobre don Santos había muerto 89 22| alcázar de la fe... del pobre comerciante...!»~ ~ Un escalofrío 90 24| Quién lo diría!~ ~ -¡Pobre Magistral!~ ~ -¡Y qué hermosa!~ ~ -¡ 91 24| a la figura que ella, la pobre Ana, había visto tantas 92 24| abrazo de que ha gozado esta pobre mujer». ¡Ay, sí, era un 93 25| padre espiritual... es un pobre diablo. ¡Oh, pero por quien 94 25| llorar. A su lado un niño pobre, rubio, pálido y delgado, 95 26| tunante?~ ~ -No, señora; es un pobre diablo. Tenía que acabar 96 26| su seno... etc.~ ~ ~ ~ Al pobre Trifón le salían los versos 97 26| perdonaría jamás...~ ~ -¿Y el pobre calzonazos dio su permiso? - 98 26| Dios en tal instante.~ ~ El pobre don Pompeyo, el ateo, ya 99 26| una marcha fúnebre.~ ~ Al pobre Quintanar se le escaparon 100 26| amistad no ofreciera al pobre náufrago una tabla donde 101 27| que no haya nada feo, ni pobre ni triste.~ ~ Paco y la 102 28| pronto había dejado de ver el pobre aparato escénico del teatro 103 29| posible, probable que la pobre chica no sospeche nada, 104 29| disculpaba, reflexionando que el pobre Álvaro hacía aquello por 105 29| pegarse un tiro. Ana, la pobre Ana, tenía derecho a una 106 29| circunstancias de prodigar. «¡Pobre Ana, qué sabía ella de todas 107 29| podía decir con razón: «¡Pobre Ana, que no sabe nada de 108 29| Petra podía exclamar: «¡Pobre don Álvaro, que no sabe 109 29| nuca.~ ~ «Era el otro; ¡pobre, no sabía lo que le aguardaba!»~ ~ 110 29| espíritu.~ ~ «Ay, sí, era un pobre viejo; un pobre viejo, y 111 29| era un pobre viejo; un pobre viejo, y le engañaban, se 112 29| Mesía y entierre viva a la pobre Ana...! ¡Ay, Ana también 113 29| dinamita en el cerebro del pobre viejo.~ ~ «¡Soy un tal, 114 29| amigo. Sí, se apoyaba el pobre viejo con cariño, confianza, 115 30| de Ana le habían caído al pobre ex-regente como una maza 116 30| se hizo mística...? Y la pobre... también tuvo que sufrir 117 30| a caer sobre el sofá el pobre viejo, que volvía a sentir 118 30| muere cantando. Sintió el pobre viejo una compasión supersticiosa: 119 30| honra difunta de aquella pobre viuda encerrada entre cuatro 120 30| sus labios decían:~ ~ -¡Pobre Ana! ¡Perdida sin remedio! ¿ 121 30| torpeza!~ ~ -¡Eso! ¡Eso!~ ~ -¡Pobre don Víctor!~ ~ -Sí, pobre, 122 30| Pobre don Víctor!~ ~ -Sí, pobre, y Dios le haya perdonado..., 123 30| del gran mundo. Pero el pobre don Cayetano había caído 124 30| Crespo resolvió divertir a su pobre amiga en su misma casa.~ ~ «¡ 125 30| una obra de caridad. La pobre estará mal de recursos y 126 30| rico..., pero es uno tan pobre...»~ ~ «Y -añadía -, por