Cap.

  1      1|            noche en la tertulia de Visitación Olías de Cuervo, Obdulia
  2      2|        conocido, eran la Regenta y Visitación; estaba seguro. ¿Cómo habían
  3      2|          llegaron las dos señoras. Visitación se confesaba cada dos o
  4      3|         dicho Ripamilán y lo demás Visitación, que acompañaba a la de
  5      5|            ella. Tarsila, Obdulia, Visitación, otro pimpollo que se escapaba
  6      6|        Arcipreste y la Regenta con Visitación. Es más, el Magistral se
  7      7|        Obdulia y él, ni lo de él y Visitación; y en cuanto a sus relaciones
  8      7|       tenía que pasarla en casa de Visitación para hacer las empanadas
  9      7|       Entonces..., ¿cómo está aquí Visitación?~ ~ -¿Y qué hacen en la
 10      8|       harían respetar? Allí estaba Visitación, por ejemplo. Algunas madres
 11      8| disposición de ánimo.~ ~ Obdulia y Visitación, desde la ventana de la
 12      8|           de la bofetada.~ ~ Donde Visitación demostraba su intimidad
 13      8|           de la nobleza?~ ~ Cuando Visitación era soltera, se dijo -¡de
 14      8|           hablaba con desprecio de Visitación y hacía gestos mal disimulados
 15      8|         del Marqués por chanza.~ ~ Visitación y Mesía, más tranquilos,
 16      8|         saborear los recuerdos.~ ~ Visitación también tenía brasas en
 17      8|          de años.~ ~ -¡Bah! -decía Visitación con un poco de tristeza
 18      8|          Comprendía don Álvaro que Visitación quería precipitar a la Regenta
 19      8|         cita era sabia y oportuna. Visitación suponía a don Álvaro enterado
 20      8|                Anita, Anita -gritó Visitación.~ ~ Entonces Mesía pudo
 21      9|            cansando a usted! -dice Visitación a un rubio con cuello marinero,
 22      9|            para eso está allí».~ ~ Visitación siempre tiene que hacer
 23      9|         risueños, arrugaditos, que Visitación cree que echan chispas.
 24      9|          rebaja un perro chico.~ ~ Visitación triunfa. Pero no sabe que
 25     10|  norteamericano; se lo había dicho Visitación...~ ~ «¿Por qué no había
 26     10|          han prometido ayudarme, y Visitación, que estaba en la platea
 27     11|   confesata en la tertulia de doña Visitación, esa tarasca; sí señor,
 28     12|            era nuevo».~ ~ Cosas de Visitación. Se trataba de seducir a
 29     12|     despreciaba el tal círculo.~ ~ Visitación fue la primera dama agregada,
 30     12|        ponía el cascabel al gato? -Visitación, la del Banco». ¿Quién más
 31     12|              Sí -decía en la junta Visitación -, que venga Olvido; así
 32     12|          de dominarse y disimular. Visitación se complacía en adivinar
 33     12|           acústico cada palabra de Visitación sonaba como siete; parecía
 34     12|          del médico, luego aquella Visitación, La Libre Hermandad, Olvidito
 35     13|            que celebraba sus días, Visitación, Edelmira, sobrina de la
 36     13|        encontró en la escalera con Visitación y Quintanar que buscaban
 37     13|         decir algo a la Regenta, a Visitación o a Edelmira, le dejaban
 38     13|             En aquel momento entró Visitación en el gabinete, echando
 39     13|   conciliábulo, salieron Obdulia y Visitación, corriendo, alborotando,
 40     13|           señora, Obdulia Fandiño, Visitación, doña Petronila Rianzares (
 41     13|            entre Quintanar, Paco y Visitación. La idea se debía a la del
 42     13|           señor Magistral si, como Visitación sospechaba, a este ilustre
 43     13|         brazo secular de Mesía.~ ~ Visitación había dicho a Paco de buenas
 44     13|        cuerno quemado -así hablaba Visitación con sus amigos íntimos.~ ~ -
 45     13|             al señor Magistral.~ ~ Visitación lo arregló todo en un minuto.~ ~
 46     13|            y cuidando de la prole. Visitación lo exigía así. No había
 47     13|        gran arbitrista rentístico? Visitación. Pues que la dejasen divertirse,
 48     13|          lo sobrenatural y divino. Visitación entró en el despacho equivocada...~ ~ -¡
 49     13|           se lo expuso c por b.~ ~ Visitación lo aprobó en todas sus partes
 50     13|           viva fuerza habían hecho Visitación y Quintanar que Ana se vistiera «
 51     13|               Mesía recordó lo que Visitación le había dicho la tarde
 52     13|            estaba entre Edelmira y Visitación; la Regenta entre Ripamilán
 53     13|           sin pensar que le miraba Visitación, que estaba a su lado. Un
 54     13|           Y don Álvaro agradecía a Visitación el aviso y volvía a engolfarse
 55     13|            hacerlo, pero nada más. Visitación veía visiones. «¿Qué era
 56     13|           secreto, y otras veces a Visitación, a quien había querido siendo
 57     13|         por un balcón. Ni siquiera Visitación le había hecho caso en su
 58     13|          la Marquesa y a Edelmira. Visitación llegó a levantarse de la
 59     13|             que tocaba allá dentro Visitación en un piano desafinado,
 60     13|         iban todos aquellos locos, Visitación, Obdulia, Paco, Mesía, a
 61     13|          Tuvo la culpa Paco -decía Visitación, ceñidas con una cuerda
 62     13|              Aúpa...! -gritó abajo Visitación para mayor ignominia.~ ~ -¡
 63     14|          caso de ese señor? -decía Visitación la del Banco -, un hombre
 64     16|          formado entre Quintanar y Visitación había empezado a caer en
 65     16|           en el coto de Quintanar, Visitación sentía la garganta apretada,
 66     16|           único placer intenso que Visitación se permitía en aquella vida
 67     16|           influencia del Provisor. Visitación y Paco Vegallana, que eran
 68     18|          explicaba la Regenta cómo Visitación iba y venía de casa en casa,
 69     18|      pasado acaso para siempre.~ ~ Visitación se volvía loca. Su marido,
 70     18|        enfriaba, y al fin aparecía Visitación, sofocada, distraída, de
 71     18|            de que no daba un paso. Visitación sentía ahora una vergüenza
 72     19|            vano la Marquesa, Paco, Visitación y Ripamilán acudieron presurosos
 73     19|          temprano, desde lejos.~ ~ Visitación, mientras sentada a los
 74     19|            poder de criadas, ni de Visitación, que la aturde con su cháchara...;
 75     19|        ropa, ni dejar... que entre Visitación..., que la aturde. ¡La ciencia
 76     19|        decía para sus adentros.~ ~ Visitación procuraba meterle a Ana,
 77     21|       naturaleza».~ ~ La Marquesa, Visitación, Obdulia, doña Petronila
 78     21|           cabeza de aquella chica. Visitación estaba volada, furiosa. «¡
 79     21|           se presentó en el Parque Visitación Olías de Cuervo, a quien
 80     22|          parecía por aquella casa. Visitación también iba de tarde en
 81     22|           bastidores, don Álvaro y Visitación Olías de Cuervo trabajaban
 82     23|            tenía muy confusa idea. Visitación estaba también allí, más
 83     23|           Paco Vegallana, cerca de Visitación, fingía resistir la fuerza
 84     24|           por especial privilegio, Visitación y Obdulia, pariente de nobles.
 85     24|     sonrisas... De pronto apareció Visitación, la del Banco, que vestía
 86     24|      Pregúntaselo tú misma...~ ~ -¡Visitación!, tú estás loca...~ ~ -Ja,
 87     24|          alegre, fingía enamorar a Visitación y recitaba versos de sus
 88     24|         siempre declamando para su Visitación:~ ~ ~ ~En fin, señora, me
 89     24|         porque no os poseo...~ ~ Y Visitación le tapaba la boca con las
 90     24|            Anita! -le decía Paco a Visitación por lo bajo.~ ~ -Claro,
 91     25|             de las monedas con que Visitación y la Marquesa golpeaban
 92     26|            mesa de Santa María con Visitación; volvía también Obdulia
 93     26|           presidenta, la Marquesa, Visitación, Obdulia, las del barón
 94     26|          ateo, ya había muerto.~ ~ Visitación, la del Banco, en vez de
 95     28|         Edelmira, respectivamente. Visitación los habrá ayudado. Bermúdez
 96     28|      Vivero no se iba a otra cosa. Visitación, Obdulia y Edelmira también,
 97     28|         Bermúdez volvió a Vetusta; Visitación, Obdulia, Edelmira, Paco
 98     28|          corredor del primer piso. Visitación estaba un poco borracha,
 99     28|          caballos y jinetes.~ ~ Ni Visitación ni Paco se atrevían ya nunca
100     28|    despedirse de los árboles...~ ~ Visitación azotó con fuerza las teclas
101     29|       Somoza.~ ~ -Cuidado -repetía Visitación.~ ~ Y él mismo notaba que
102     30|     virtuosa de la Regenta no sólo Visitación Olías de Cuervo y Obdulia