Cap.

 1      1|         de marfil rodando por la mesa. Y sin el anteojo ¡quiá!,
 2      1|        ocupaba largo espacio una mesa de mármol negro, del país.
 3      2|          mano en el mármol de la mesa, porque los codos no llegaban
 4      3|         libro que tenía sobre la mesa de noche. Era un tomo de
 5      5|         no tenían qué poner a la mesa; todo lo había comido la
 6      6|        dos porteros cerca de una mesa de pino. Era costumbre inveterada
 7      6|         Y daba un puñetazo en la mesa.~ ~ Vinculete callaba y
 8      6|        largo. En medio había una mesa oblonga cubierta de bayeta
 9      6|     oxidadas.~ ~ Alrededor de la mesa cabían doce personas. Pocas
10      6|          cajón. Se acercaba a la mesa, después de respirar fuerte,
11      6|       iba a anochecer. Sobre una mesa de mármol brillaba entre
12      6|     rincón, alrededor de aquella mesa, arrellanados en un diván
13      6|         a callar todos.~ ~ En la mesa de enfrente, gritaba un
14      6|         apoyar el respaldo en la mesa, dijo:~ ~ -Me lo ha contado
15      6|              Ello fue que de una mesa de colegio electoral pasó
16      7|        Dejó los guantes sobre la mesa, pidió café y se puso a
17      7|       aquellos platos de segunda mesa se los comía Paco Vegallana,
18      8|      casa y descargaba sobre una mesa aquellos sacos para contar
19      8| preparando las provisiones de la mesa de Vegallana; podía asegurarse.~ ~
20      8|         a la parrilla, sobre una mesa de pino, blanca y pulcra.~ ~
21      8|   estaban las perdices, sobre la mesa de pino, ofreciendo el contraste
22      8|        en el fuego y atento a la mesa. No era viejo. Tenía cuarenta
23     10|      lámpara suspendida sobre la mesa... La ofendía aquella luz.
24     10|          tener fósforos sobre la mesa. Voy a escribir al Magistral;
25     11|       manos y los codos sobre la mesa, olvidado ya del Papa infalible -;
26     11|         dio un puñetazo sobre la mesa.~ ~ -Voy, señorito -gritó
27     11|    también tocó los libros de la mesa, pero no se atrevió con
28     11|         apoyó los codos sobre la mesa, que era de las llamadas
29     11|        se fijó en el orden de la mesa, en el del sillón, en el
30     12| terciopelo carmesí detrás de una mesa de ministro cargada de papeles
31     12|          rapavelas.~ ~ Había una mesa en cada esquina, y alrededor
32     12|        importunos y se fue a una mesa a preguntar por un expediente
33     12|         qué había de preferir la mesa de los marqueses a la de
34     13|         voz que les llamase a la mesa, Ana disimuladamente se
35     13|          la confianza en aquella mesa no significaba la escasez
36     13|          que era notable aquella mesa, ni, en fin, de comer lo
37     13|     cogerla... En otra parte una mesa revuelta; más allá un bodegón
38     13|        la vertical del centro de mesa, en un medallón, el retrato
39     13|     conocían sus caprichos de la mesa y la servían solícitos,
40     13|     sobre hojuelas.~ ~ Los de la mesa correspondían a la alegría
41     13|         llegó a levantarse de la mesa para azotar con el abanico
42     13|        ascos a platos de segunda mesa, en siendo suculentos.~ ~ ~ ~
43     14|          baladí. Se apartó de la mesa.~ ~ -A propósito. ¿Por qué
44     15|        al comedor, De Pas vio la mesa puesta con dos cubiertos.
45     15|          Paula encendió sobre la mesa del despacho el quinqué
46     15|        Paula se sentó junto a la mesa de lado, como los cómicos
47     15|        Con un codo apoyado en la mesa y la cabeza en la mano,
48     15|     acababan por clavarse en una mesa de pino, amenazas sordas
49     15|          de otros clérigos, a la mesa, después de comer bien y
50     15|      plataforma, más baja que la mesa en que el ama repasaba los
51     16|          en el comedor. Sobre la mesa quedaban la cafetera de
52     17|          despacho, se sentó a su mesa, y, separando libros y papeles,
53     17|        haber dejado encima de la mesa de mármol o de un banco,
54     18|          glorioso polvo sobre la mesa del despacho diabólicos
55     18|      daba vuelta alrededor de la mesa oval, y acababa por acercarse
56     20|       junta. Tuvo que cambiar de mesa y de sala, si quiso seguir
57     20|        de piernas, delante de la mesa pequeña, la de carambolas,
58     20|         venía del mostrador a la mesa de don Santos, se le quedaba
59     20|          juego, se sentaban a la mesa presidida por don Pompeyo
60     20|     íntimas, casi nunca veía una mesa bien puesta. Así le parecía
61     20|      plata Meneses; el centro de mesa en que se erguía un ramillete
62     20|         lleno de promesas, de la mesa aún pulcra, correcta, intacta.~ ~
63     20|        con un codo apoyado en la mesa y la barba apoyada en la
64     20|     maestro. Quitó el codo de la mesa y apoyó en ella los dos
65     20|       escuchar, apoyándose en la mesa o en el hombro del más cercano.
66     20|          junto a la camilla, una mesa cubierta con gran tapete
67     20|        cayó Juanito debajo de la mesa.~ ~ A todos había indignado
68     20|          Y dio un salto sobre la mesa agarrándose a una columna
69     20|          dos Orgaz hijo sobre la mesa.~ ~ -Me han embriagado con
70     20|       Cuando se levantaron de la mesa amanecía. Se había hablado
71     20|          un libro negro sobre la mesa y exclamó:~ ~ -¡Oh, mi queridísimo
72     20|      explosiva. Lo dejó sobre la mesa con miedo y con ciertas
73     21|          y enfrente de ellos una mesa cubierta de damasco viejo,
74     21|          y, colocada cerca de la mesa, recitó con desparpajo una
75     21|       puerta, y se acercaba a la mesa; dejaba sobre ella el servicio,
76     21|        separando el cuerpo de la mesa; abría la boca de labios
77     22|        pan que quedaban sobre la mesa, un poco de azúcar y otros
78     24|           quitó periódicos de la mesa y puso manteles, cerró con
79     24|          por el buen gusto de la mesa. Los ojos montaraces le
80     24|          la música, se separó la mesa hacia un rincón y, apretándose
81     25|          vueltas alrededor de la mesa, alrededor de su madre. «
82     25|           disputando junto a una mesa, allá en Loreto, con un
83     25|         cobrando muy caro. En la mesa de petitorio, colocada frente
84     26|         de negro, de pedir en la mesa de Santa María con Visitación;
85     26|     recaudado veinte duros en la mesa de petitorio de San Isidro.
86     27|       dejaré esta noche sobre la mesa del gabinete y tú las cogerás
87     27|     ciudad y se les ha puesto su mesa en el palacio viejo, donde
88     27|       presidir el servicio de la mesa de aldea, aún vestida de
89     28|         no hay como el mar, y la mesa redonda, y la casa de baños,
90     28|      confesiones, volvieron a la mesa, donde reinaba la dulce
91     29|        de Petra, que servía a la mesa. Después del café pudo notar
92     29|       Álvaro; le encontraba a la mesa más decidor y simpático
93     29|   disimulo, apoyó una mano en la mesa. Hubo una pausa -. Habla,