Cap.

 1      1|         piedad de sus mayores: la religión con las formas aprendidas
 2      1|         obligaríanles a imitar en religión, como en todo, las maneras,
 3      1|           señoras desacreditan la religión». Obdulia ostentaba una
 4      4|       Nunca le habían enseñado la religión como un sentimiento que
 5      4|       comparada, encontraba en la religión de los indios dogmas parecidos.~ ~
 6      4|   revelación para ella. Probar la religión por la belleza, le pareció
 7      4|         para bien se entiende, de religión. Un tomo del Parnaso Español
 8      5|    sociedad civilizada. Amaban la religión, porque éste era un timbre
 9      5|           servíale sin embargo la religión; pero muy poco para consuelo
10      9|       esto no lo ordenase nuestra religión, lo mandaría el sentido
11      9|     mandaría el sentido común. La religión es toda razón, desde el
12      9|         imperiosas de la vida. La religión no presentaba como una senda
13      9|           como una rutina. Sí, la religión verdadera se parecía en
14      9|           la noche pensando en la religión, en la virtud en general,
15      9|        político, transigía con la religión de los mayores de Paco y
16     10|        pecar?~ ~ -¡El arte es una religión! -advirtió don Víctor consultando
17     11|           doy, no. Yo entiendo la religión y la moral a mi manera;
18     11|            pero quiere traer a la religión el romanticismo, y yo, ¡
19     11|       decía don Fermín explicando religión. «Pero a una mujer otra
20     11|     comercio como un judío con la Religión del que arrojó del templo
21     12|  convencido de que la causa de la religión no prosperaría si los buenos
22     12|           de los progresistas, en religión se le tenía por volteriano,
23     12|     ilustrada, ¿cree usted que la religión consiste en dejarse morir
24     12|           era un matadero; que la religión conducía a la juventud lozana
25     12|    relativamente. No basta que la religión esté en los labios, no basta
26     12|     fueron convenciendo de que la religión era un freno para el socialismo
27     12|        ferviente partidario de la religión de sus mayores. «Indudablemente -
28     12|           había logrado entrar la religión, en forma de Magistral,
29     12|       llegó a ser para Olvido una religión el traje. No lucía dos veces
30     13|           materialismo que era su religión, le llevaba a pensar que
31     13|          de esto, una cosa era la religión y otra los intereses locales;
32     13|          V. E., señor Marqués, la religión, el arte y la historia le
33     15|   entendámonos; usted predica una religión de paz... pues bien, ese
34     16|           buscaba el amparo de la religión para luchar con los peligros
35     17|        modo. ¿Por el terror de la religión? Patarata. La religión para
36     17|         la religión? Patarata. La religión para aquella señora nunca
37     17|      preocupaciones que toman por religión muchos espíritus apocados...
38     17|           y hasta aparatoso en la religión verdadera que en las frías
39     18|          creído que recomendar la religión por su hermosura exterior
40     18|       Esto era humillante para la religión y depresivo para don Fermín;
41     20|           que distinguir entre la religión y sus ministros». «Ellos
42     20|          no debía, no podía tener religión positiva determinada».~ ~
43     20|          raíces y retoños de toda religión positiva. No le agradaba
44     20|          demagogo y enemigo de la religión del Estado.~ ~ Llegó al
45     20|           el Casino jamás tendría religión, como no debía tenerla el
46     20|          la horca.~ ~ Se habló de religión otra vez. Don Frutos expuso
47     21|           arrogante amazona de la religión, que labraba con arte la
48     21|         llevaba el consuelo de la religión para el espíritu y la limosna
49     22|         que es, en definitiva, mi religión.~ ~ Y volviéndose a Foja
50     22| distinciones sospechosas entre la religión y el clero, entre el catolicismo
51     22|           templo más propio de la religión pura, y que Jesucristo había
52     22|          comulgar, no reconoce la religión de sus mayores. Estas son
53     22|   confesión que le parezca, o sin religión alguna si lo considera conveniente».~ ~ -¡
54     22|    Provisor, había renegado de la religión por culpa del Provisor,
55     23|           cosa era bien clara, la religión no podía ser más sencilla,
56     23|        era hermoso, según Ana; la religión que lo consentía, maternal,
57     23|       toda la grandeza de aquella Religión dulce y poética que comenzaba
58     23|         de carne repleta. Como la religión es igual para todos, allí
59     23|  empujasen. Para la de Fandiño la religión era esto, apretarse, estrujarse
60     25|    abierto su alma a la luz de la religión, de la virtud... Ana pensó
61     25|      corazón, el que decía que la religión es un homenaje interior
62     25|        con los tristes, ésa es la religión eterna; vivir llorando por
63     25|         que le debía su honra, su religión, lo más precioso, le abandonaba
64     26|  renegaban en sus comilonas de la religión positiva para seducirle
65     26|          se dijo: «Al fin hay una religión, la del hogar».~ ~ A la
66     26|     hablaba con don Pompeyo de la religión, de sus dulzuras, de la
67     26|       usted cuánto puede ganar la Religión con lo que usted ha hecho
68     26|         calles del pueblo más que religión.~ ~ -¡El papel Provisor
69     26|           eficacia material de la religión; pero sin incurrir en un
70     26|     Aquello no era piedad, no era religión; era locura, simplemente
71     26|   aburrimiento, máquinas de hacer religión, reclutas de una leva forzosa
72     27|          quería consolarse con la religión y el amparo del Magistral,
73     27|         en que fuera todavía pura religión cristiana. No quería ella
74     27|           aire libre, el arte por religión, un cielo lleno de pasiones
75     28|      corazonadas, que era toda su religión, Álvaro buscó más en lo
76     29|           buscaría consuelo en la religión y ahí teníamos al señor
77     29|         servir a Dios, que al fin religión era también el interés del
78     29|        entero... Veinte siglos de religión, millones de espíritus ciegos,
79     30|       refugio para mi alma que la religión.~ ~ -Bueno, pues si eres
80     30|            y sordo a la voz de la religión, se arrojase a tomar venganza
81     30|           cuanto sacerdote de una religión de paz y de perdón, tenía
82     30|        muchas cosas que exigía la religión a un buen cristiano a quien
83     30|         su honor y aquello que la religión le pedía...~ ~ Entonces
84     30|         hombre: la filosofía y la religión triunfaban en el ánimo de
85     30|       parecía bien, le parecía la religión compatible con el marasmo
86     30|          darse cuenta de ello, la religión vulgar (que así la llamaba
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