Cap.

 1      1|           muy abierta y desdentada seguía a su manera los aspavientos
 2      1|         área total de la Encimada: seguía en tamaño las Recoletas,
 3      2|   renunciado; no a la primera, que seguía adorando con el mismo pudibundo
 4      2|        Regenta, ¿pues qué dignidad seguía? la suya; la jerarquía indicaba
 5      2|             Pero el pobre lugareño seguía diciendo que sí a todo.~ ~ «
 6      3|       oscuridad y pegada a la cama seguía llorando, tendida así, de
 7      4|      pensativa, altanera, callada; seguía soñando; la dieta le daba
 8      4|         ser el aya, su hombre, que seguía esperando, y las tías de
 9      4|      cerebro. Pasaba esto mientras seguía leyendo; aún estaba aturdida,
10      4|          un recodo de la senda que seguía, Ana vio de repente nuevo
11      4|      Cuando todavía el pensamiento seguía dictando a borbotones, tuvo
12      5|          lo mismo, el alma...~ ~ Y seguía filosofando para venir a
13      5|            hubiera podido escoger -seguía pensando Ana -. Que lo dijera
14      6|                Vinculete callaba y seguía recibiendo codillos.~ ~
15      6|    cavilosa, como todos sabemos -y seguía bajando la voz, y los demás
16      7|          los palcos y las butacas, seguía Ronzal el movimiento de
17      7|          iba haciendo, le espiaba, seguía, como sus miradas, sus pasos,
18      8|            el marqués de Vegallana seguía siendo árbitro en las elecciones,
19      8|              tres..., cuatro... -y seguía marcando el paso, apoyándose
20      8|            Fulanita, bueno ¿y qué? Seguía leyendo. Y pensaba: «Todos
21      8|           ella sus hijas. Entonces seguía pensando: «Buenas son mis
22      8|            se acordaba de aquello; seguía siendo aturdida, tenía fama
23     10|          la vida le había traído y seguía trayendo sin buscarlos.
24     10|          aquella prisión, mientras seguía gritando:~ ~ -¡Petra! ¡luz! ¿
25     10|            libraba de ellas aunque seguía sacudiendo el brazo. Buscó
26     10|            la hermosura. Y la luna seguía corriendo, como despeñada,
27     10|          melancolía mal disimulada seguía, los nervios erre que erre...
28     11|          pantorrilla. El Magistral seguía con los ojos los movimientos
29     11|          pero espiritual, humilde: seguía siendo esbelto, pero no
30     12|         observaciones ni mandatos, seguía herborizando y se había
31     13|            tambor de marina» y que seguía dominando en ella el criterio
32     13|          iba satisfecha a su lado; seguía figurándoselo como un escudo
33     14|       Fortunato leía las pruebas y seguía sonriendo. No parecía temer
34     14|       fuera -¿¡si sería cognac!? - seguía molestándole y conocía ya
35     14|              pensó don Fermín, que seguía inmóvil.~ ~ La del balcón
36     15|      beneficioso para Zapico, éste seguía estimando a doña Paula.
37     15|           aguardiente?~ ~ Barinaga seguía diciendo:~ ~ -Sí, señor
38     16|           parecía retebién, Álvaro seguía su persecución con gran
39     16|      imposiciones de nadie», no se seguía un juicio hecho. La ópera,
40     16|         Ronzal, que, como siempre, seguía la pista a los telégrafos
41     17|           me interesaba saber cómo seguía, quería decirle que no creo
42     17|               Petra temblaba, pero seguía dispuesta a mentir si le
43     18|            flores.~ ~ Quintanar le seguía muerto de sueño, encerrado
44     18|             afirmaba un rodrigón y seguía adelante, arrastrando los
45     18|        Regenta... Por lo demás, él seguía considerando que ante todo
46     19|            su lado, sin querer Ana seguía entonces el pensamiento
47     19|        enfermedades del mundo, que seguía a la parte facultativa de
48     19|          nacimiento.~ ~ Anochecía, seguía lloviendo, los mozos de
49     19|     Rinconada?~ ~ Mesía, callando, seguía a don Víctor.~ ~ Una intuición
50     20|        todas partes, pero nadie le seguía.~ ~ En Vetusta no se aclimataba
51     20|     envidias pasajeras, y Frígilis seguía sonriendo y movía la cabeza
52     20|          Vestía hábito del Carmen. Seguía pálida, pero había vuelto
53     21|            vez a su confesonario». Seguía el Magistral ocultándose
54     21|         enfermedad probable si Ana seguía aquel camino peligroso.
55     21|     maneras, él estaría alerta». Y seguía velando por los árboles
56     21|           lectura de Santa Teresa. Seguía enamorada de la Doctora
57     21|         dentro llena de emociones. Seguía encontrando en la oración
58     21|      ridículo, porque ella, Anita, seguía entregada a las vanidades
59     21|       Poder, él, Víctor Quintanar, seguía aburriéndose en aquel pueblo
60     22|           Trifoncito Cármenes, que seguía siendo romántico, contra
61     22|            se le rebelaba. Si bien seguía creyéndose profundamente
62     22|   conversación, amena compañía.~ ~ Seguía confesando y comulgando
63     22|        cada dos meses, pero Kempis seguía cubierto de polvo entre
64     23| enternecida estaba la Regenta, que seguía en su libro la sencilla
65     23|    misticismo y fraternidad de que seguía gozando en compañía de aquel
66     23|            lado de la Regenta, que seguía de rodillas, sollozando
67     25|               Oh, sí, estuve loca -seguía Anita, espantada todavía -,
68     26|            a la realidad presente, seguía saboreando la escena de
69     26|         era natural; todo Vetusta -seguía pensando Obdulia - tiene
70     27|          tormento. A pesar de todo seguía confesando a menudo con
71     27|           en la mísera berlina que seguía al paso. Incapaz de toda
72     28|          pensaba Quintanar, que le seguía jadeante, con un palmo de
73     28|            que antes, subrepticia, seguía minando el terreno, y a
74     28|         con frecuentes libaciones, seguía abriendo el pecho ante la
75     28|    nerviosa. Aquellos chicos, como seguía llamándolos Ripamilán, también
76     28|           el caserón. En la cocina seguía la algazara. Lo demás todo
77     29|           casa se quedó pensativo. Seguía con la mirada disimuladamente
78     29|          la juventud».~ ~ «Álvaro -seguía pensando Ana - había hecho
79     29|              Mesía había jurado, y seguía jurando todos los días,
80     29|           don Fermín...!»~ ~ Petra seguía hablando, pero hacía rato
81     29|           en la calleja y su amigo seguía apuntando al cielo.~ ~ -¡
82     29|           era tiempo.~ ~ La mañana seguía cenicienta; nubes y más
83     30|          caserón a su amo, a quien seguía el Magistral.~ ~ «No pregunta